Al menos 20 heridos y 16 detenidos tras dos semanas de protestas en la Isla
menos 20 heridos y 16 detenidos es el balance de las dos semanas de manifestaciones en el Viejo San Juan para exigir la renuncia del gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, según un reporte presentado ayer por varias ONG, que denuncian un “evidente exceso de uso de fuerza del Estado”.
La cifra aparece en una documentación preliminar que preparó la organización local Kilómetro Cero, junto con la Unión Americana de Libertades Civiles, el Colegio de Abogados y Abogadas de Puerto Rico (CAAPR), la Brigada Legal SolSidaria, Amnistía Internacional Capítulo de Puerto Rico y el Instituto Caribeño de Derechos Humanos.
Tras las protestas, Rosselló anunció, finalmente, el pasado miércoles su renuncia ante el escándalo desatado por su participación y la de algunos de sus de sus asesores en un polémico chat en el que se burlaban de rivales políticos, artistas y miembros de la comunidad LGBT.
“Hemos creado este informe con gran sentido de urgencia. Es un documento preliminar y vivo. Es decir, estará en constante desarrollo. Seguimos recibiendo y confirmando información sobre los casos que ya hemos identificado o sobre otros nuevos”, expresó Mari Mari Narváez, directora ejecutiva de Kilómetro Cero.
Las personas resultaron heridas específicamente durante las protestas desarrolladas entre el 11 y el 25 de julio frente a La Fortaleza, sede del Ejecutivo, donde cientos de personas se manifestaron para exigirle a Rosselló que renunciara, tras la publicación del chat privado.
Durante esas dos semanas de protestas, la Policía detuvo a 16 personas, según la documentación preliminar de intervenciones y casos.
De acuerdo con el documento publicado en la página web de Kilómetro Cero, al menos 43 personas resultaron afectadas por acciones de la Policía durante las protestas.
Los incidentes reportados incluyen macanazos, disparos de municiones de goma, gas pimienta, gases lacrimógenos, golpizas, daños a la propiedad y otras agresiones.
El informe resalta cinco denuncias relacionadas con el mal manejo de las multitudes, el uso desproporcionado de fuerza por parte la Policía e intimidaciones de agentes del orden público en las redes sociales.
“Al mirar los vídeos, fotos y testimonios de esta documentación, es evidente el exceso de uso de fuerza del Estado en el contexto de una actividad protegida como es la protesta”, aseguró Narváez. El informe señaló también que “no todo uso de fuerza de parte de la Policía fue excesivo”.