‘El muro nunca se abrió a los peregrinos’
Celebran Posada Sin Fronteras, aunque en esta ocasión la Patrulla Fronteriza no permitió los cantos del otro lado de la muralla de metal de 30 pies
“En el nombre del cielo, os pido posada”, cantaron el fin de semana migrantes en Tijuana, al celebrar la tradicional Posada Sin Fronteras junto al muro fronterizo metálico de 30 pies de alto que nunca se abrió a los peregrinos.
Sin cruzar la frontera, la posada fue motivo de celebración para la Coalición Pro Defensa del Migrante, que reúne a todas las organizaciones en Tijuana.
La celebración inició con una pastorela que crearon los migrantes. Un demonio molesto por ver tanta gente en el mundo se propone impedir que un migrante llegue a su destino; el feligrés se había quedado en el camino por no poder mantener el paso de sus compañeros rumbo a Belén.
Lo ignoran las personas que lo ven tirado en la calle, hasta que un joven pobre lo lleva a su casa, mientras el demonio y un ángel se disputan el futuro del migrante.
Todo se resuelve con alegría porque los tres reyes magos se llevan al migrante al sitio donde María Migrante está por dar a luz a unos pasos de la frontera de San Diego, donde el bien vence al mal.
María Migrante, la joven Sandra Valdez, fue después a hincarse con su bebé Dios junto al monumento que marca los límites de la República Mexicana y los Estados Unidos, justo donde simbólicamente nació el bebé.
Esta vez los migrantes también cantaron un rap. “… alegremente por estas bendiciones por estas decisiones, que tomamos cuando salimos del hogar con la meta de triunfar, de triunfar”, cantaron los jóvenes artistas (de la orden de los) salesianos.
Los migrantes compartieron con algunos visitantes tijuanenses tamales y chocolate caliente, abrazos y felicitaciones.
Todos cantaron los tradicionales villancicos navideños. Entonces al lado norte del muro les habrían abierto con cantos de “entren santos peregrinos peregrinos, reciban este rincón… que aunque pobre la morada, la morada…”.
Pero el capitán Isaac Olvera del Ejército de Salvación de la Colonia La Libertad, lamentó que esta vez las autoridades de migración impidieron que la Posada Sin Fronteras se llevara a cabo con diálogo de cantos de feligreses de ambos lados de la frontera.
Tradicionalmente religiosos del lado de California responden a los cantos de los migrantes en Tijuana, pero esta vez la patrulla fronteriza prohibió el acceso. Informó
«Es una lástima que 26 años consecutivos hemos celebrado la Posada Sin Fronteras a ambos lados del muro y esta vez nos frustren de esta manera». Isaac Olvera,