Sin brillar, los ‘Reds’ ganan en Ámsterdam
Un autogol del argentino Nicolás Tagliafico en la primera parte le sirvió al Liverpool para ganarle al Ajax (0-1), que estrelló una pelota en el palo al iniciar la segunda parte y se vio impotente para tratar de igualar el marcador, aunque no lo consiguió.
Liverpool tenía la necesidad de dar un golpe de autoridad que acallara las críticas. En Ámsterdam, sin mostrar su mejor juego, se impuso gracias a su mejor control del balón, la certeza de sus contraataques y las llegadas por la banda izquierda de Sadio Mané.
Enfrente tuvo a un Ajax que se parece poco al que sorprendió al mundo hace dos temporadas, cuando los hombres de Erik ten Hag casi llegan a la final de la Liga de Campeones. El entrenador es el mismo, pero las bajas son obvias. El club ha ingresado decenas de millones de dólares con la venta de cuatro jugadores clave de aquella plantilla -- Frenkie de Jong, Matthijs de Ligt, Donny van de Beek y Hakim Ziyech -, pero el precio deportivo ha sido alto.
Liverpool tuvo problemas en la salida para encontrar su juego vertical que le caracteriza. Se desesperaba Jürgen
Klopp en la banda con los despistes de su defensa y se desgañitó cuando dejaron que Ryan Gravenberch, la última perla de la cantera de Ámsterdam, disparara solo desde la frontal del área en el 21’.
En el 35’, la mala fortuna se cruzó en el camino del conjunto neerlandés. Mané hizo una buena internada al área por izquierda y realizó un extraño disparo. La pelota rozó a Blind y se le envenenó a Tagliafico, quien en su intento de rechazarla se equivocó y terminó alojando el esférico en su propia puerta.
En la reanudación, Ajax empezó con un disparo de Klaassen con el empeine que besó el palo.
En el 60’, Klopp retiró a sus tres jugadores más ofensivos, Mohamed Salah, Mané y Firmino, y tuvo más solidez en el centro del campo y anuló al Ajax, para preservar el 0-1 que lo deja como colíder del Grupo D junto al Atalanta.