La seguridad, la meta principal para la final
“Lo más importante es que los jugadores se enfoquen solo en la pelota ... Con la seguridad jugamos un partido aparte en donde siempre debemos salir ganadores”
Los preparativos para la final única de la Copa Sudamericana entre los equipos argentinos Lanús y Defensa y Justicia se han puesto en marcha con la coordinación de la seguridad del partido, que se disputará este sábado en la ciudad de Córdoba.
La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) anunció este miércoles en un informe que la preparación arrancó con una reunión de la gerencia de seguridad del organismo con representantes del gobierno provincial, autoridades locales y guardia privada.
El director de Competiciones de Clubes de la Conmebol, Frederico Nantes, destacó la situación atravesada por el fútbol regional en medio de la pandemia del coronavirus, que obligó a una pausa forzada de varios meses y a que los encuentros se disputen a puerta cerrada como hasta ahora.
“Tenemos que estar orgullosos de realizar esta final acá (en Córdoba), que igual sin público en las gradas, debe ser una gran fiesta”, afirmó Nantes, citado en el comunicado.
El dirigente resaltó que la seguridad “debe estar garantizada y respaldada como si fuera que hay espectadores en el estadio”.
La reunión congregó además a miembros de los responsables de seguridad y de la Comisión Médica de la Conmebol, así como a delegados de los equipos finalistas.
La cobertura de seguridad para la final abarca desde el aeropuerto, hoteles de los equipos, árbitros, autoridades, campos de entrenamientos, flujos de rutas asignadas para cada delegación, hasta el estadio sede del partido, explicó el gerente de seguridad de la Conmebol, Gustavo Morelli.
“Para nosotros lo más importante es que los jugadores se enfoquen solo en la pelota, que solo piensen en el partido y estén ajenos a los hechos externos. Con la seguridad jugamos un partido aparte en donde siempre debemos salir ganadores”, indicó Morelli.
Además, se dieron pautas con respecto al protocolo COVID-19 para evitar contagios, mediante el uso constante de mascarillas, lavado frecuente de manos y distanciamiento social, entre otras medidas sanitarias.
En este sentido, el organismo rector del fútbol sudamericano ha previsto una base de datos con los resultados negativos de las pruebas de COVID-19 de todas las personas que estarán presentes en el estadio Mario Alberto Kempes.
Para el efecto, todas las personas “deben presentar obligatoriamente el RTPCR NEGATIVO (Polymerase Chain Reaction en tiempo real) Hisopado Naso y Oro Faríngeo” para el acceso al estadio, en el marco del Protocolo de Recomendaciones Médicas para Entrenamientos, Viajes y Competiciones.
Esta normativa, aprobada por las autoridades sanitarias
de los diez países afiliados al organismo, le permitió a la Conmebol proseguir durante 2020 con la Copa Sudamericana y Copa Libertadores, cuya final única está prevista para el 30 de enero en Río de Janeiro, también sin público.