BIDEN Y LA JUSTICIA RACIAL Y CLIMÁTICA EN AMÉRICA LATINA
En los primeros tres meses, la Administración Biden-Harris ha definido como prioridades clave el avance de la justicia racial, la lucha contra el cambio climático global y la promoción de la paz. Estas prioridades se han ratificado en informes recientes, en particular la Declaración de la Administración Biden-Harris sobre el nuevo marco de política antinarcóticos, la estrategia del Departamento de Estado para el control internacional de estupefacientes y los informes de los países sobre prácticas de derechos humanos en 2020. Todos estos documentos oficiales reflejan promesas convertidas en expectativas concretas frente a la nueva política de Estados Unidos hacia América Latina y el Caribe.
En este contexto es preciso mencionar que en Colombia, como en el resto de América Latina y el Caribe, las comunidades afrodescendientes tienen las tasas más altas de pobreza, el menor nivel educativo y están sub-representadas en las posiciones de liderazgo del Estado.
Las comunidades afrocolombianas han confrontado el marginamiento no solo en las discusiones sobre el propio conflicto y la violencia, sino también en las relacionadas con el desarrollo y las iniciativas de conservación en tiempos de paz. Colombia es el segundo país con mayor biodiversidad del mundo.
En la actualidad, la deforestación, debido a actividades tanto ilícitas como algunas lícitas, representa una grave amenaza para la Amazonía y para la región predominantemente afrodel Pacífico. La respuesta para la protección de estos bosques vitales debe incluir el fortalecimiento de la Ley 70. Esta ley abrió el camino jurídico para la titulación colectiva de estos territorios tradicionales.
La titulación colectiva ha fortalecido la capacidad de las comunidades afrocolombianas para conservar y proteger sus tierras. Múltiples estudios han encontrado que los territorios con títulos colectivos tienen, como promedio, tasas de deforestación más bajas que las tierras individuales y, en algunos casos, que los parques nacionales tradicionales.
En Colombia, como en todo el mundo, la justicia racial, la paz, la acción climática y la conservación de la biodiversidad están entrelazadas. Durante mi gestión como ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, bajo la presidencia de Juan Manuel Santos, abordamos el ajuste institucional y la formulación de políticas clave para dar cumplimento a los Compromisos adquiridos en el marco del Acuerdo de París, la Convención de Diversidad Biológica y el Acuerdo de Paz de 2016. Sin embargo, queda mucho trabajo por hacer, más aún, teniendo en cuent.
Con el congresista Gregory Meeks al frente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara Baja y fuerte aliado de Colombia; además, con una mayoría en el Congreso, el presidente Biden tiene la oportunidad de implementar una política exterior para América Latina y el Caribe que refleje la centralidad de las minorías raciales y étnicas en la región.•