Mohamed Salah derriba el muro ‘Colchonero’
Mohamed Salah derribó la resistencia del Atlético de Madrid, que levantó un 0-2 adverso en la primera parte, quedó con diez hombres por la expulsión de Antoine Griezmann y solo cayó 2-3 con un penalti transformado por el egipcio, que asienta al Liverpool como líder del Grupo B.
En un duelo trepidante, los rojiblancos pasaron de la nada absoluta durante 13 minutos, en los que el conjunto inglés desmontó su orden defensivo con el primer gol de Salah y una volea de Naby Keita, a remontar el partido con dos tantos de Griezmann y obligar al portro rival, Alisson Becker, a dos paradas salvadoras antes del descanso.
Los ‘Reds’, que llegaban con 33 goles en 11 partidos oficiales, se adelnataron a los ocho minutos, cuando Salah recogió un centro desde la banda contraria, amagó ante Yannick Carrasco, Lemar y Koke, y disparó entre los defensas para el 0-1.
Los locales, aún aturdidos, se fueron abajo 0-2 cuando un flojo despeje de Felipe fue aprovechado por Keita para marcar el segundo tanto con una espléndida volea.
Viendo el partido perdido en menos de un cuarto de hora, el conjunto rojiblanco intentó jugar y engarzó su primeras combinaciones en campo rival y de ello surgió un córner que sorprendió a la vista, cuando Lemar corrió la línea de fondo, puso un pase atrás y el tiro de Koke emuló al de Salah, pero esta vez con Griezmann tocando el balón de forma decisiva para embocar el 1-2 al 20’.
Griezmann, que desperdició un mano a mano ante Alisson , no tardó en redimirse gracias a un arranque de genio de Joao Félix, quien le habilitó para que, tras un autopase largo ante la marca de Virgil van Dijk, chutara desde el suelo para hacer el 2-2 al 34’.
Atlético de Madrid volteó el encuentro en tiempo récord y, a diferencia de otras ocasiones, quiso más, pero Alisson evitó la celenración de los de casa.
En el segundo tiempo, la búsqueda local del 3-2 la paró en seco una acción desafortunada de Griezmann, que al estirar la pierna para intentar alcanzar un balón dio con la bota en la cara a Roberto Firmino, por lo que el árbitro alemán Daniel Siebert no dudó en sacar la tarjeta roja que el galo rojiblanco ni protestó.
Con uno más, Liverpool encadenó ocasiones, pero sin exigir en exceso a Oblak, hasta que un choque de Mario Hermoso con Salah dentro del área en un balón que ambos tenían perdido acabó en penalti, que el egipcio no perdonó para sentenciar el 2-3 al 78’.
La victoria asienta al Liverpool como líder invicto del grupo con nueve puntos y castiga en exceso a un cuadro ‘Colchonero’ que mantiene el segundo puesto con cuatro puntos, los mismos que Porto, que venció como local 1-0 al AC Milan.