Un libro revela los músicos que Freddie Mercury amó y odió
Que Freddie Mercury era un personaje complejo es de sobra sabido, pero una nueva y particular biografía de Queen narra una larga lista de episodios sobre la vida tanto del cantante como del grupo que dejan claro a quién amaba y a quién despreciaba el carismático líder del grupo.
Entre las relaciones del artista que disecciona “Magnifico: The A to Z of Queen”, fruto de los amplios conocimientos y numerosas entrevistas del periodista Mark Blake, están la cercana amistad con Monserrat Caballé, la relación frustrada con Michael Jackson, la feroz competitividad con David Bowie o la tensión inicial con “Sex Pistols”.
“Él era un fan enorme de la ópera, y había ido a verla en Londres, en Covent Garden”, cuenta Blake sobre la admiración que sentía Mercury hacía Caballé.
“(Mercury) nunca se centró únicamente en música rock o música pop. Tenía toda una serie de influencias extrañas”, agrega el autor del libro, que sale a la venta el 11 de noviembre, en el mismo mes en que se cumplen treinta años de la muerte del artista.
El capítulo sobre la soprano barcelonesa detalla la primera reunión entre Mercury y Caballé en un salón privado
del Hotel Ritz en Barcelona, en la que el británico admitió que estaba tan intimidado que “no sabía cómo tratarla”.
Entre las fuentes más frecuentes de Blake para escribir este libro, que de momento no se prevé sea publicado en español, está el guitarra de Queen, Brian May, y el batería, Roger Taylor, a quienes ha entrevistado numerosas veces en los últimos 30 años. “Hay mucho material que no había usado antes”, apunta.
Sobre su relación con otro de los grandes de la música, Michael Jackson, el libro expone una serie de hechos que dejan caer que, aunque inicialmente se llevó bien con
el rey del pop y existió una admiración mutua durante años, la relación acabó enfriándose.
Bowie sale algo mejor parado que Jackson en el libro, en el que se subraya la clara competitividad que había entre los miembros de Queen y el responsable de “Heroes”, quien por ejemplo se les adelantó por poco con una innovadora vestimenta femenina sobre el escenario.
La rivalidad durante más de una década, sin embargo, desembocó en 1981 en el éxito “Under Preassure”, que supuso un aire fresco tanto en la carrera de Queen como de Bowie.