Planean poner fin parcial a protección judicial de niños inmigrantes
La administración Biden analiza una supervisión adecuada al Acuerdo Flores
Se espera que la administración Biden intente poner fin parcialmente al Acuerdo Flores, que proporciona supervisión judicial sobre cómo el gobierno federal cuida a los niños inmigrantes bajo su custodia, según dijo a The Associated Press un abogado de Derechos del Niño, que representa a los niños en el caso.
La medida que se anticipa que ocurra, seria dada a conocer solamente unas semanas después de que el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) publicara su propia norma sobre salvaguardias de niños inmigrantes que entrará en vigor a partir del 1 de julio y que según el secretario Xavier Becerra establecerá “estándares claros para el cuidado y tratamiento de niños (inmigrantes) no acompañados”.
Los defensores de los niños dicen que lo que se conoce como el Acuerdo Flores ha sido fundamental para garantizar condiciones seguras para los niños inmigrantes, especialmente en medio del aumento de las detenciones fronterizas en los últimos dos años, que incluyeron a casi 300,000 menores no acompañados.
El intento de deshacer parcialmente a Flores se produciría menos de tres semanas después de que Salud y Servicios Humanos publicaran una norma que establece salvaguardias para la custodia de los niños inmigrantes.
El secretario Xavier Becerra dijo que la norma, que entrará en vigor el 1 de julio, establecerá “estándares claros para el cuidado y tratamiento de niños (migrantes) no acompañados”. El HHS dijo el mes pasado que la regla “implementa y va más allá” de Flores.
La nueva norma crea una oficina del defensor del pueblo independiente, establece estándares mínimos en los refugios temporales desbordados y formaliza avances en los protocolos de detección para entregar a los niños a familias y patrocinadores y para servicios legales.
El acuerdo Flores de 1997 fue el resultado de más de una década de litigios entre abogados que representan los derechos de los niños inmigrantes y el gobierno de Estados Unidos por acusaciones generalizadas de malos tratos en la década de 1980.
La demanda original fue presentada en nombre de cuatro adolescentes, incluida Jenny Lisette Flores, una joven de 15 años de El Salvador.
La demanda detalla cómo Flores y los otros demandantes fueron retenidos por el gobierno durante largos períodos de tiempo, a menudo en instalaciones con adultos no emparentados, y no recibieron educación ni tratamiento médico adecuado.
El acuerdo estableció las normas para la detención, el tratamiento y la liberación de menores. Ordena que los niños migrantes sean entregados sin demora necesaria a la familia, a un programa de bienestar infantil o a un adulto que solicite la custodia si la reunificación familiar no es posible.l