Residente se siente más libre tras su primer álbum como solista
Con dos premios, de nueve nominaciones que incluyeron a grabación, canción y álbum del año, en los Latin Grammy, Residente ya puede relajarse.
El astro puertorriqueño, que encabezó la lista de nominados con su primer proyecto en solitario post-Calle 13, confiesa que sintió la presión de hacer “algo enorme y maravilloso” tras una década de éxitos con el dúo más galardonado en la historia de los premios.
“Fui muy preciso con cada sonido, con cada palabra, con los videos, con la página. Aprendí mucho con este proyecto y ahora solo quiero hacer algo de música y estar tranquilo, y eso es lo que estoy haciendo”, dijo Residente en una entrevista.
“Residente”, que Rolling Stone incluyó en su lista de los 50 mejores álbumes de la primera mitad de 2017, fue un proyecto multicultural inspirado en los orígenes del artista, según pruebas de ADN, que lo llevó a recorrer el mundo a lo largo de dos años.
También le mereció nominaciones a mejor álbum de música urbana, mejor fusión/ interpretación urbana por “Dagombas en Tamale”, mejor canción urbana por “Somos anormales”, mejor canción alternativa por “Apocalíptico”, mejor canción tropical por “Hijos del cañaveral” y mejor video musical versión corta por “Desencuentro”, el tema con Soko cuyo video dirigió él mismo, con las actuaciones de Edgar Ramírez y Charlotte Le Bon.
Las nominaciones “significan mucho”, dijo. “Para cualquier artista es difícil irse solo tras trabajar en una propuesta como Calle 13 (...) así que en ese sentido para mí fue maravilloso”.
“Residente”, que salió el 31 de marzo y con el cual finalmente ganó el Grammy Latino a mejor álbum de música urbana, incluye 13 canciones que escribió y grabó a lo largo de dos años en los que viajó por las tierras de origen de algunos de sus ancestros. Comenzó en la provincia rusa de Siberia, y también visitó China, el Cáucaso y África Occidental, entre otras regiones. También dirigió un documental sobre la realización del disco, así como los videos musicales de “Somos anormales” (ganadora del Grammy Latino a mejor canción de música urbana), “Guerra” y “Desencuentro”.
“Este proyecto fue algo realmente personal”, dijo el músico, cuyo verdadero nombre es René Pérez. “Yo quería hacer algo enorme y maravilloso para sentirme bien, tú sabes. Y ahora que lo hice, siento que puedo hacer realmente cualquier cosa. ... Me siento más libre”.
Como la música que solía hacer con su hermano Eduardo Cabra — Visitante, en Calle 13 — el álbum es tan ecléctico que le mereció nominaciones en géneros como música urbana, alternativa y tropical.
Mencionó que “Hijos del cañaveral”, que escribió para Puerto Rico, tuvo un significado distinto. Pero también confesó que el tema más especial esu no que le escribió a su hijo Milo, que alfi nal decidió no presentar enl os Latin Grammy.
“No quise nominar esa canción porque es para mi hijo. No sé, no quise usarla para eso. (...) La música es agradable. Me gusta mucho esa canción”.