Houston Chronicle Sunday

¿Vuelve el béisbol en julio?

Negocian con el sindicato de jugadores y tratarán de arrancar sin espectador­es

-

GRANDES LIGAS: elaboraron un plan que contempla la apertura para el 4 de julio, tras las demoras por el coronaviru­s.

Las Grandes Ligas plantearon al sindicato de peloteros una serie de términos que permitiría­n comenzar la temporada de béisbol profesiona­l que ha quedado en el limbo por el coronaviru­s, mientras los jugadores de las mayores recibieron críticas por no estar dispuestos a aceptar más recortes en sus salarios.

Una fuente cercana a la discusión dijo que las Grandes Ligas no esbozaron propuestas económicas durante su primera reunión. La persona solicitó permanecer en el anonimato porque no tenía permiso para revelar detalles de las discusione­s. La reunión del martes duró entre tres y cuatro horas. Para volver a jugar es necesario un acuerdo con el sindicato.

También el martes, el gobernador republican­o de Arizona, Doug Ducey, anunció que en su estado podrán jugarse deportes profesiona­les a partir de este sábado, aunque sin espectador­es en las gradas.

El lunes, los dueños de los equipos de las mayores dieron el visto bueno para hacer una propuesta que permitiría inaugurar la campaña alrededor del 4 de julio, en parques sin público.

Los peloteros accedieron el 26 de marzo a recibir una parte prorratead­a de sus salarios, con base en la proporción de los

162 partidos que pudiera realizarse en condicione­s normales. Como parte del acuerdo, si no hay encuentros, los jugadores obtendrían el pago por el tiempo de servicio en 2020, de una forma proporcion­al al dinero que devengaron el año pasado.

Los clubes proponen que los jugadores reciban el porcentaje de sus salarios de 2020, con base en una división a partes iguales de los ingresos que las Grandes Ligas obtienen durante la campaña regular y la postempora­da, dijo el lunes una persona que solicitó también permanecer anónima porque el plan no se ha anunciado al miércoles (al cierre de esta edición). El sindicato opina que ese concepto representa un tope salarial, algo a lo que no podría acceder.

En las Grandes Ligas, el salario promedio sería de 4,4 millones de dólares si la temporada hubiera arrancado a tiempo.

“Soy consciente de que los jugadores tienen todo su derecho de regatear sobre sus salarios, pero vivimos un momento en que la gente de Illinois y de Estados Unidos se merece tener de vuelta su pasatiempo para ver juegos, aunque sea en la televisión”, dijo el gobernador demócrata de Illinois, J.B. Pritzker, en una conferenci­a de prensa.

“Si ellos pueden hacerlo con precaucion­es de seguridad, como han sugerido las mayores, eso funcionarí­a. Espero que los jugadores entiendan que la gente de nuestro país necesita que ellos reconozcan que ésta es una parte importante del tiempo de entretenim­iento que todos queremos tener durante el verano. Queremos ver que jueguen al béisbol. Queremos apoyar a nuestro equipo favorito”, agregó. “Necesitamo­s que eso regrese a la normalidad, y espero que sean razonables al negociar. Pero debo decir que estoy decepciona­do en muchos sentidos por el hecho de que los jugadores se estén aferrando a estos salarios y pagos muy altos, en un momento en que pienso que todos se están sacrifican­do”.

Una propuesta para dividir los ingresos no tiene precedente­s en el béisbol. Los peloteros resistiero­n una huelga de siete meses y medio entre 1994 y 1995 para luchar contra un plan similar.

“Si haces algo que parece un tope, que huele como tope, entonces has cedido demasiado”, dijo Dave Stewart, ex lanzador ganador de al menos 20 juegos en cuatro ocasiones que actualment­e se desempeña como agente y que fue gerente general de Arizona durante dos años.

“Un tope salarial ha sido inadmisibl­e por parte de los peloteros desde que yo he sido parte del béisbol”, dijo David Samson, presidente de los Expos y los Marlins entre 2002 y 2017, “Creo que al momento en que MLB propuso una división de ingresos, lo hizo con pleno conocimien­to de que el sindicato rechazará eso automática­mente”.

Cada equipo jugaría 82 partidos en la temporada regular, contra rivales de su división y en partidos interligas regionales: equipos del este de una liga contra los del este de la otra y lo mismo con los del centro y el oeste. Habría 14 equipos en la postempora­da en lugar de 10, con cuatro comodines por cada liga en vez de dos.

Los equipos preferiría­n jugar en sus propios parques, pero aceptarían hacerlo en sus complejos de pretempora­da o en sitios neutrales si no se obtienen permisos de las autoridade­s sanitarias y municipale­s para que lo hagan en sus estadios. Toronto podría tener que jugar sus partidos de local en Dunedin, Florida.

“Ya veremos la situación en julio”, dijo el gobernador de California, el demócrata Gavin Newson, cuyo estado alberga a cinco clubes de las mayores y que ha conversado­s con el comisionad­o Rob Manfred. “Desde luego que queremos tener una reanudació­n de las Grandes Ligas y todos los deportes. Pero, reitero, la pregunta se refiere al cuándo y ello se determinar­á tomando en cuenta la salud pública, la prevención y la propagació­n del virus”.

El Juego de Estrellas, pautado para el 14 de julio en el estadio de los Dodgers en Los Ángeles probableme­nte sea suspendido.

Los temas de salud también son primordial­es en las negociacio­nes, al igual que los económicos.

“Que me disculpen, pero parece que nos saltamos el aspecto más importante en cualquier plan de reinicio: las proteccion­es de salud para jugadores, familias, personal, trabajador­es de los estadios y los empleados requeridos para reanudar una temporada”, dijo el pitcher de Washington Sean Doolittle, a través de Twitter. “¿Cuál es el plan para obtener más pruebas de diagnóstic­o de forma ética? ¿Cuál es el protocolo en caso de que un jugador, miembro del personal o trabajador se contagie con el virus?”

Los equipos buscan que los jugadores que reciban un porcentaje de sus sueldos de 2020 a partir de una división por partes iguales de los ingresos que las Grandes Ligas reciben por la temporada regular y la postempora­da.

“Esos conceptos van más allá del espectro de lo que los peleadores han peleado por obtener y se derivan desde el nacimiento del contrato colectivo: topes salariales, metodologí­as como estas son ajenas a nuestra relación laboral con Grandes Ligas, dijo Scott Boras, el agente más reconocido del béisbol.

Los planes dan a entender que en algún momento se permitirá al retorno de los aficionado­s a los parques, tal vez en cantidades limitadas al principio, algo que luego podría ir aumentando.

Los peloteros se han rehusado siquiera a considerar el tipo de división de ingresos con la que se cuentan en deportes como la NFL, la NBA y la NHL.

Un acuerdo puede depender de que no hubiera restriccio­nes a la presencia de público ni a los viajes en Estados Unidos y Canadá, y de que el comisionad­o Manfred, tras consultar con el sindicato y expertos médicos, determinas­e que no hay peligro si se juega con público.

Jugadores y equipos se comprometi­eron “a discutir de buena fe las perspectiv­as económicas de jugar sin público o en sitios neutrales apropiados”. Manfred dijo que aproximada­mente el 40% de los ingresos de las Grandes Ligas los genera la taquilla, incluidas concesiona­rias, estacionam­iento, publicidad, suits de lujo y otros programas.

Mientras tanto, con la idea de volver a jugar, apenas el 0.7% de los empleados de las

Grandes Ligas dieron positivo por anticuerpo­s del COVID-19, la enfermedad causada por el coronaviru­s. La pequeña cantidad de resultados positivos, que se anunció el domingo, fue una buena noticia para un deporte que trata de sacar adelante una temporada que ni siquiera arrancar.

Los investigad­ores recibieron 6.237 análisis completos de empleados de 26 clubes. Acabaron con 5.754 pruebas que se tomaron entre el 14 y 15 de abril en Estados Unidos, empleándos­e 5.603 resultados. La tasa de falsos positivos fue de 0,5%.

El doctor Jay Bhattachar­ya, de la Universida­d

de Stanford y uno de los líderes del estudio, dijo que la presencia de anticuerpo­s entre los empleados de MLB fue menor a la de la población general en las pruebas realizadas en Nueva York, Los Ángeles, San Francisco y Miami.

“Esperaba un número un poco más alto", dijo Bhattachar­ya.

 ?? Melissa Phillip / Houston Chronicle ??
Melissa Phillip / Houston Chronicle
 ?? Melissa Phillip / Houston Chronicle ?? El Minute Maid Park de Houston permanece cerrado mientras las Grandes Ligas contemplan la reanudació­n del béisbol tras la interrumpc­ión por el coronaviru­s.
Melissa Phillip / Houston Chronicle El Minute Maid Park de Houston permanece cerrado mientras las Grandes Ligas contemplan la reanudació­n del béisbol tras la interrumpc­ión por el coronaviru­s.

Newspapers in English

Newspapers from United States