J Balvin sacudió a Houston
REGGAETÓN: el astro colombiano brilló en Sugar Land.
Hay una energía muscular masculina que recorre gran parte del sonido del reggaetón, y el colombiano J Balvin está haciendo una gran carrera, y ha generado millones de seguidores en la web, para ubicarse a la cabeza de lo mejor de ese género musical.
Es una de las figuras más destacadas de esta ‘segunda ola’ del reggaetón y cuenta con un increíble número de 44 millones de oyentes mensuales en Spotify, superado sólo por Drake en el mundo.
J Balvin, quien lanzó en mayo su álbum "Vibras", ha ampliado su alcance al asociarse con la houstoniana Beyoncé (en el tema "Mi Gente), Justin Bieber ("Sorry" Latino Remix) y Cardi B y el puertorriqueño Bad Bunny en el reciente éxito número 1 "I Like It", aunque es discutible que los haya ayudado a ellos tanto como le han ayudado a él con esas colaboraciones.
Una sensación surrealista de locura es evidente en su actual ‘Vibras Tour’, que comenzó hace menos de un mes y atrajo a una multitud bulliciosa el jueves por la noche en el Smart Financial Centre de Sugar Land, al subailar, doeste de Houston.
Balvin atrajo a más de 74.000 fanáticos a principios de este año en el NRG Stadium, en su debut en el Rodeo de Houston, en el primer acto de reggaetón de la historia en ese evento.
Dinosaurios de colores brillantes con cabezas flotantes recorrían los pasillos antes de que apareciera Balvin en el escenario, chocando entre sí y posando para las fotos. Era una vista previa prehistórica de lo que vendría, "una inmersión del Jurásico en el dinosaurio que vive en todos ustedes", como dijo, que hizo eco de la portada de su álbum.
La extravagancia también se trasladó a su vestuario, uno de los mejores en exhibición para un artista importante en los últimos tiempos.
J Balvin se asoció a Guess para lanzar una colección en este tour llena de colores vibrantes, diseños llamativos y ajustes a medida. Había neones y sudaderas con capucha y ojos saltones y, por supuesto, muchos dinosaurios.
Una lista con instrucciones para el público apareció en las pantallas mientras las luces se atenuaban: aplaudir, tomar muchas fotos, no mirar a los dinosaurios, lanzar bragas y sujetadores en el escenario.
“Esto no es una biblioteca o un concierto de (el tenor español) Plácido Domingo. ¡Griten!”, dijo el artista.
J Balvin comenzó con el ritmo de ‘Machika’, vestido de naranja brillante y un cinturón plateado. Caminó por el escenario semidesnudo cuando un muñeco de dinosaurio T-Rex gigante apareció detrás de él, moviéndose al ritmo de la canción. Fue la primera de muchas piezas más grandes que la vida real.
Balvin, a propósito, no se mueve demasiado en el escenario y, a veces, recuerda a Drake y Kanye West por su postura.
Mantiene la línea, a veces ofrece algunos movimientos descarados, mientras que la acción se desarrolla alrededor y delante de él.
Las pantallas parpadeaban con vívidas imágenes y palabras. Ocho bailarinas atléticas giraron y voltearon. La multitud bailó y cantó junto a todos los éxitos: "Ginza", "Ahora", "Si tu Novio te Deja Sola", "Mi Gente".
Se le unieron dinosaurios de color amarillo brillante y bailarinas con medias rosadas y máscaras de dinosaurios.
Más tarde, él estaba frente a una bola naranja gigante con ojos y dientes y un enorme huevo de dinosaurio. Fue maravillosamente extraño, emocionante de ver y probablemente la última vez que tocará en un lugar tan pequeño.
“Es la primera vez que veo a J Balvin en vivo, bailé, canté y disfruté mucho el concierto”, dijo Yadira Torres, de 28 años y de Houston. Indicó que sus canciones favoritas eran ‘Bonita’ y ‘Sigo extrañandote’.
Daniela Vierra, mientras tanto, dijo que a seguido la trayectoria de Balvin por más de una decada.
“Recuerdo sus presentaciones en las minitecas en Colombia”, dijo la colombiana de 28 años. “Fue emocionante verlo en concierto en Houston, me encantó la escenografía de esta gira, los colores, la musica y la vibra”.