ACLU reclama investigar creciente militarización de la frontera sur
La Unión de Libertades Civiles de EEUU (ACLU) instó ayer a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a que investigue la situación en la frontera sur, donde miles de migrantes afrontan no sólo una creciente militarización sino también trabas para acceder al asilo en este país.
Cynthia Pompa, del Centro de Derechos de la Frontera de ACLU, viajó a Washington desde El Paso (Texas) para participar en una audiencia de la CIDH sobre la “militarización de la seguridad pública” en las Américas, que abordó también la crisis en la frontera entre EEUU y México.
La audiencia se llevó a cabo dos días después de que el secretario de Defensa, Jim Mattis, aprobó la solicitud del Departamento de Segu- ridad Nacional (DHS) de extender por 45 días la estancia de los soldados en activo en la frontera sur hasta el próximo 31 de enero, como parte de sus esfuerzos por desalentar la inmigración ilegal.
Los soldados, desplegados en California, Arizona y Texas, proveerán apoyo logístico, de instalación y reparación de barreras, seguridad y transporte para los agentes de la Patrulla Fronteriza.
“Estamos ante un incremento de la militarización de la frontera jamás antes visto, y es especialmente preocupante por las restricciones que afrontan los migrantes para acceder al asilo, y porque ya hay un historial de impunidad por los abusos” de agentes de la Oficina de Aduanas y Control de Fronteras (CBP), explicó Pompa. Según ACLU, con el argumento de reforzar la seguridad fronteriza, la Administración Trump se propone expandirla CPB aún más.