La Opinión

El recuerdo más antiguo de una deportació­n

Doña Elisa es una de las primeras víctimas de los programas de deportació­n masiva que Estados Unidos ha implementa­do a lo largo de la historia. En 1930, cuando tenía 5 años de edad y a pesar de ser nacida en Estados Unidos, fue expulsada junto con sus pad

- Jorge Morales Almada

Los 93 años que doña Elisa tiene de vida le han dejado el rostro todo arrugado, los ojos faltos de brillo, el cuerpo encorvado, una cabellera plateada y un bastón que la acompaña en su lento caminar.

Esas más de nueve décadas también le han desvanecid­o o borrado muchos de los recuerdos que se almacenan en la parte del cerebro que los científico­s llaman hipocampo y que es mejor conocida como memoria.

Sin embargo, doña Elisa aún tiene muy presente uno de los momentos que marcarían el destino de su vida y que le ocurrió en 1930, cuando apenas era una niña de 5 años y vivía en Santa Paula, California.

Esa imagen del pasado que ha llevado en su mente por 88 años es el de su deportació­n.

Lo que evoca su memoria, dice doña Elisa en entrevista, es el momento en que ella, su papá, su mamá, su hermanita de 3 años, y otros dos hermanos de 9 y 11, fueron subidos a un tren para ser enviados a la frontera con México.

Su nombre completo es Elisa Esqueda Zamarripa, nació el 20 de julio de 1925, en la desértica ciudad de Phoenix,

en Arizona, donde su papá, José Esqueda, se había establecid­o tras emigrar de México y trabajaba para una compañía de ferrocarri­les.

Luego la familia se mudó a Santa Paula, una comunidad en el condado de Ventura, a 70 millas al noroeste de Los Ángeles, donde vivió hasta el verano de 1930, cuando fue víctima del programa de deportació­n masiva que emprendió el presidente Herbert Hoover.

Un año antes Estados Unidos había caído en la mayor crisis económica de la historia, la llamada Gran Depresión, por lo que el gobierno acusó a los inmigrante­s del sur de ser parte del problema y decidió expulsarlo­s, creando un ambiente hostil en contra de todo aquel que pareciera mexicano, una situación muy similar a la que se repetiría décadas después con Donald Trump como presidente.

Las secuelas de una deportació­n

Al ser deportado, José Esqueda regresó con su esposa y

Newspapers in Spanish

Newspapers from United States