CUIDADO CON EL DINERITO
La llegada del Black Friday o Viernes Negro marca el inicio de la temporada de fin de año con su ajetreo de alegría y estrés.
Las promociones y largas filas en los comercios, que inician cada vez más temprano, nos sirven como excusa perfecta para pensar en nuestros seres queridos y en lo que significan en nuestras vidas y también para ejercer uno de los pasatiempos nacionales favoritos: las compras.
Un vendaval de ofertas nos aborda desde el mundo real y el virtual para enfatizar este convenio de consumo que sufre ahora crecientes presiones inflacionarias como resultado del ajuste post pandémico.
Todo parece muy caro, pensamos en la tienda, al tiempo que decidimos aprovechar la oportunidad de hallar ese artículo que quizás pronto se acabe. Y es que ahora también estamos condicionados por las alteraciones de la cadena de suministros, que desde la crisis del papel higiénico en medio del clímax del Covid, nos hizo caer en cuenta de algo raro para esta sociedad de excesos: que las
existencias de productos son limitadas.
La economía sigue saludable pese a las recientes alzas en las tasas de interés, y la larga inyección de liquidez del gobierno, junto con un mercado laboral sólido, hacen posible para muchos darse ciertos lujos que hasta hace poco eran escasos.
Pero hacemos un llamado a la calma y la mesura. Indicios de una crisis se avizoran en el horizonte, y en varias industrias, los pedidos para mediados de 2023 muestran una sensible disminución. Quizás sea este un indicador de que las herramientas para reducir el recalentamiento de la economía están creando el impacto deseado.
Nunca nos ha parecido buena idea endeudarnos más allá de nuestras posibilidades y menos ahora en caso de que aparezca esta recesión y como ya lo han advertido expertos financieros desde hace varios meses.
Hacemos un llamado a quien quiera escuchar, a ejercer prudencia a la hora de las compras. No todo el cariño y el amor debe pasar por el consumismo desmesurado y debemos estar alerta para guardar un ahorro de emergencia, si es que podemos hacerlo, en caso de que las cosas se compliquen.
Al mismo tiempo, sondeos muestran un alza en los fraudes y estafas, y crecientes oportunidades para que los amigos de lo ajeno se aprovechen de la buena fe en esta época e intenten un sinnúmero de trampas en las cuales los latinos parecemos caer más rápido.
Así que tengamos cuidado del gasto excesivo, las solicitudes de donaciones benéficas -que representan más de un tercio de las estafasla compra de artículos a través de anuncios en línea (un 40% de los fraudes) y las notificaciones falsas sobre problemas de envío de paquetes (otro 27 %).
Y ¡felices compras!•
Alexis McGill Johnson:
La decisión de la corte de restaurar la prohibición del aborto en Georgia interfiere directamente con las decisiones médicas personales de la gente en Georgia. A las personas que están embarazadas se les negará su derecho a la autodeterminación, y a decidir lo que es mejor para su salud y la de sus familias. Para las personas negras en Georgia, la negación de un cuidado esencial de salud reproductiva puede ser mortal. Aunque estamos devastados por la decisión de hoy, aún tenemos que luchar.
Louis Frankel:
Georgia está reinstaurando su dañina prohibición de seis semanas que bloquea el acceso al aborto antes de que muchas mujeres se enteren de que están embarazadas. No se equivoquen, esto es un ataque a la libertad reproductiva y debemos contraatacar.
Amy Kennedy:
Es inconcebible que la Corte Suprema de Georgia haya optado por negar a las personas embarazadas la capacidad de decidir qué es lo mejor para sus propias vidas y su futuro.