¿En qué se gastarán los recursos?
Con el anuncio del secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, sobre 35.600 millones de dólares para el desarrollo económico y cooperación en el sur de México y el Triángulo Norte de Centroamérica (Guatemala, El Salvador y Honduras) varias son las preguntas sobre el destino final de los fondos.
Ebrard detalló que convocarán a una reunión a nivel de gabinete a fines de enero de 2019 para el diseño, implementación y monitoreo de objetivos y que los orígenes del dinero serán de la siguiente manera pero de inmediato varios analistas platearon ciertos puntos delicados del programa binacional.
“Lo que preocupa es que no se diga en qué se va a gastar: no hay estudios de impacto de desarrollo, en qué industrias, estudios de vocación (por ejemplo: no se pueden hacer proyectos de software si no hay ingenieros); niveles de especialización, ventaja comparativa…¡no hay planes de negocios! y si no se hace bien se va ir todo a fondo perdido”, advirtió Adolfo Laborde, experto internacionalista de la Universidad Anahuac.
Para Rodolfo García, analista de migración centroamericana para la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) el nuevo proyecto destaca que, a diferencia de planes similares que se hicieron en administraciones previas para el desarrollo del sur, desde el sexenio de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña, los planes de Andrés Manuel López Obrador sí incluyen a los empresarios locales. “La visión centralista hizo que previamente no funcionaran”.
No obstante, observa dos problemas futuros: el prime-