TRUMP VUELVE CONTRA ‘OBAMACARE’
El presidente Donald Trump prometió el martes desde su Twitter que el Partido Republicano será “el partido de la atención médica”. Horas antes su administración retomó la ofensiva para eliminar la ley de seguro de salud que hoy protege a millones de estadounidenses.
La administración Trump desde el primer momento se negó a defender la Ley de Cuidado de Salud Asequible (conocida como Obamacare) ante una demanda de 20 procuradores estatales republicanos. Posteriormente, el entonces secretario de Justicia Jeff Sessions decidió no arremeter contra la ley en su totalidad sino contra la cláusula que prohibía a las empresas aseguradoras discriminar a los pacientes con enfermedades preexistentes.
El nuevo secretario de
Justicia, William Barr, comunicó que la Casa Blanca ahora respalda por completo el fallo insólito de un juez federal de distrito de Texas. El magistrado determinó que la supuesta ilegalidad de exigir a los individuos tener cobertura del Obamacare anulaba la ley en su totalidad. La decisión final la tendrá la Suprema Corte de Justicia, que ya dio su respaldo a la legislación en dos ocasiones.
No obstante, parece que el Presidente cree que este será un buen tema para su campaña de reelección el año que viene. Esta opinión no responde a la realidad vista en la pasada elección legislativa en que varios congresistas y senadores republicanos se mostraron a favor de algunas protecciones provistas por la ley de Barack Obama.
Pero es claro que un rechazo ideológico, político o visceral no basta para realizar transformaciones. Los republicanos en el Congreso votaron durante años en contra del Obamacare pero cuando fueron mayoría en ambas cámaras no pudieron ponerse de acuerdo al repecto.
El gran fracaso no fue la bajada de pulgar a la iniciativa de ley que pretendía acabar con Obamacare del fallecido senador John McCain, que tanto odia Trump. Fue la incapacidad de elaborar una ley que la reemplace para no dejar sin cobertura médica a quienes la iban a perder, para no afectar a millones de estadounidenses.
Un grupo de senadores republicanos presentó en agosto de 2018 un proyecto para proteger a los pacientes con condiciones preexistentes, con el fin de dar un argumento positivo a sus candidatos. Pero la medida era tramposa por tener un asterisco que permitía anular la cobertura.
La mayoría de los estadounidenses respalda a ley Obamacarey se han mitigado los problemas de primas muy elevadas y de aseguradoras que se retiran de los mercados. El sistema se estabilizó.
Es posible que la estrategia republicana sea convertir en un año electoral un debate contra el plan demócrata de una cobertura médica universal.
Para eso es necesario comenzar de cero. Matar la actual ley de salud, crear una crisis quitando el seguro a millones de personas y después presentarse como una solución. Esta estrategia republicana ya fue intentada en otras áreas. La treta siempre empieza con afirmaciones de Trump como la de ahora en su Twitter.l