Clinton aboga en Orlando por los derechos de los discapacitados
La candidata hizo énfasis en ampliar oportunidades educativas y laborales para personas con discapacidad, aunque algunos asistentes latinos esperaban que abordara otros temas con la misma profundidad
Bajo un candente sol personas de diferentes ciudades de la Florida Central llegaron a las instalaciones de Frontline Outreach and Youth Center, al oeste del Downtown de Orlando, para ver y escuchar (el pasado 21 de septiembre) a Hillary Clinton, la primera mujer que podría ocupar la Presidencia de Estados Unidos.
Al llegar al lugar era prácticamente imposible ignorar a un grupo de manifestantes apostados allí con pancartas con mensajes contra el aborto. Un tema controvertido, pero que para la candidata Clinton es, en el marco de lo permitido por la ley, un derecho básico de la mujer. “Somos un grupo de personas cristianas y residentes de Orlando. Venimos aquí para levantar nuestra voz y decirles a todas estas personas que la Biblia nos dice que cada vida humana es sagrada. Hillary Clinton está a favor de matar niños inocentes. Queremos a un líder que ame y respete la Constitución de este país”, expresó Ann, de origen hondureño.
Ya en el centro recreativo, los asistentes fueron recibidos con los animados mensajes del alcalde de Orlando, Buddy Dyer, y la candidata demócrata al Congreso por el Distrito 10, Val Demings. Tras ser presentada por la joven Anastasia Somoza, una activista de los derechos de los discapacitados y que nació con parálisis cerebral, Clinton inició su mensaje con una mención a los recientes casos de afroamericanos muertos a manos de policías.
“Todavía hay mucho que no sabemos acerca de lo sucedido en los dos incidentes [en Tulsa y Charlotte]. Pero nosotros sabemos que tenemos dos nombres más que añadir a la lista de afroamericanos muertos por agentes de policía. Esto es insoportable. Y tiene que ser intolerable “, dijo Clinton, quien seguidamente condenó también los ataques recientes contra policías en Filadelfia y Charlotte y elogió el trabajo que los oficiales hacen cada día para proteger a las comunidades.
Añadió que ha hablado con muchos jefes de policía y líderes que están tan preocupados y comprometidos en una reforma del sistema de seguridad pública como lo está ella. “Ellos saben que es [algo] esencial para la seguridad de nuestras comunidades y de nuestros oficiales. Nosotros estamos más seguros cuando las comunidades respetan a la policía y la policía respeta a las comunidades”, expresó Clinton.
Luego, sin ataques ni menciones directas a su adversario Donald Trump, dio un mensaje dirigido a promover la importancia de dar mayores oportunidades de educación y empleo a las personas con discapacidad.
Para varios de los que asistieron al esperado mitin, como el vicepresidente de la Asociación de Puertorriqueños Viviendo en Florida, Andy Gutiérrez, fue sorpresivo que Clinton no profundizara en otros temas de interés para la comunidad latina, como el desempleo o la inmigración. “No era lo que yo esperaba. No hizo una sola mención de nosotros los hispanos. Tampoco nos permitieron que mostráramos los letreros de Boricua Vota. Tienen personas que no saben cómo se brega la política, en especial con los puertorriqueños. No vi ni un boricua ahí en el equipo que estuvo organizando la actividad”, dijo Gutiérrez, quien opinó que el mitin político no tuvo el enfoque idóneo para una ciudad a la que están llegando tantos boricuas e hispanos.
Tras escuchar las propuestas de Clinton para acabar con las injusticias que sufren las personas discapacitadas, la dominicana de apellido Castillo coincidió en que esperaba un mensaje alusivo a los hispanos al tratarse de un evento desarrollado en Orlando. “La gente a veces espera algo más ‘excited’ como hace su oponente [Trump]. Yo sé que las personas [discapacitadas] son una comunidad importante que también hay que atender. Pero me hubiera gustado que hablara sobre cómo mejorar los salarios”, dijo Castillo. “Yo creo que aquí hay empleos, ese no es el problema. Lo que hay que mejorar son los salarios y que la gente vuelva a tener sus 40 horas de trabajo a la semana”, añadió.
En realidad, Clinton si aludió brevemente a los latinos y a temas como el empleo para la mujer, a la necesidad de ampliar la licencia pagada y crear opciones asequibles de cuidado infantil, y destacó la importancia de lograr una reforma migratoria y los beneficios para la economía en su conjunto que generaría la legalización de los indocumentados. Pero no