Frontera colombo venezolana seguirá cerrada
En los últimos días ha habido constantes especulaciones acerca de la apertura de la frontera terrestre entre Colombia y Venezuela, cerrada desde hace más de seis meses. Lo único cierto es que los gobiernos de ambos países anunciaron que permitirán solo durante este sábado el paso de vehículos de carga y servicio público.
Según informó la Cancillería colombiana, la apertura temporal se desarrollará exclusivamente durante cinco horas, entre la 1 y 6 de la tarde, y permitirá que más de 500 vehículos venezolanos y 250 colombianos sean llevados de regreso a su lado de la frontera.
A lo largo de los más de 2.000 kilómetros que separan el oriente colombiano del occidente venezolano, se abrirán corredores de norte a sur, en Paraguachón (La Guajira); Cúcuta (Norte de Santander) y José Antonio Páez (Arauca).
La frontera fue cerrada por el presidente Nicolás Maduro para controlar el impacto del contrabando que circula desde su país hacia Colombia. A esta medida siguió la expulsión de más de un millar de colombianos y la salida de otros miles por temor a sufrir represalias en Venezuela.
Durante el último semestre ha habido encuentros bilaterales, incluso entre los Presidentes Maduro y su par colombiano, Juan Manuel Santos, sin lograr un acuerdo pero en la última semana se han vuelto más fuertes las versiones sobre una posible apertura definitiva.
El miércoles pasado, José Vielma Mora, gobernador del estado venezolano de Táchira, limítrofe con el colombiano Norte de Santander, dijo en Twitter que se estaba "a un paso" de abrir la frontera, tras evaluar con Maduro esa posibilidad.
Rene Alejandro Utrera, colombiano residente en Arauca, consultado por La Semana, asegura que el cierre de la frontera ha sido beneficioso para Colombia porque los precios de los artículos detuvieron su inflación.
Tradicionalmente eran las autoridades venezolanas las que exigían documentos a los colombianos y restringían su acceso a ese país. Sin embargo, las autoridades migratorias colombianas han aplicado en los últimos días sus protocolos en la frontera, en cuanto al paso de ciudadanos venezolanos, como una medida “para garantizar las condiciones de seguridad y orden en los pasos fronterizos”.
Están exigiendo el pasaporte o la cédula que acredite como residentes en Colombia a quienes quieran ingresar a su territorio, y se rechaza a quienes no cumplan con la documentación.
Para hacer claridad sobre estos controles, el Gobierno colombiano emitió un comunicado en el que señala que tras el cierre fronterizo ha tenido una mayor oportunidad para evaluar los principales problemas de seguridad, delincuencia, desafíos sociales, migratorios y económicos que han afectado históricamente a esta zona del país.
Según el comunicado, se definirán estrategias de largo plazo para dar soluciones duraderas a las problemáticas identificadas.
“Vamos a seguir trabajando para tener una frontera segura, moderna y beneficiosa para nuestra población. En este contexto, las medidas migratorias adoptadas por Colombia tienen como objetivo mantener el flujo regulado, seguro y ordenado en los pasos fronterizos”, dice el pronunciamiento.
Aclara además el Gobierno, que Colombia ejerce controles respetando la ley y los derechos humanos de todos los ciudadanos. Pero enseguida envía un mensaje claro para el Gobierno venezolano: “Por nuestra parte no se repetirán episodios como los que sufrieron los colombianos el año pasado cuando miles fueron expulsados”. (La Semana)