LA FLORACIÓN TEMPRANA DE JACARANDÁ GENERA DEBATE SOBRE EL CAMBIO CLIMÁTICO EN MÉXICO
CIUDAD DE MÉXICO, (Reuters) Cada primavera, las calles de la capital de México se pintan de púrpura con la 2oración de miles de árboles de jacaranda. Sus espectaculares colores no solo atraen los ojos de los residentes y turistas, sino también de las aves, las abejas y las mariposas que encuentran comida y refugio en ellos.
PERO ESTE AÑO ALGO CAMBIÓ
Algunas jacarandas comenzaron a 2orecer a principios de enero, cuando normalmente se despiertan en primavera. La 2oración temprana ha hecho sonar las campanas de alarma entre los residentes y los cientíocos de la Ciudad de México, donde los árboles se han convertido en un pilar icónico y fotogénico de las calles de la ciudad.
Los cientíocos locales han comenzado a investigar qué tan extendido es el fenómeno de la 2oración temprana, pero señalan que el cambio climático es el primer culpable.
"Siempre hemos visto que la jacaranda comienza a 2orecer hacia Onales de marzo, en primavera, cuando vemos que las 2ores cambian a violeta", dijo Constantino González, investigador del Instituto de Ciencias Atmosféricas e Investigación del Cambio Climático de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
"Están empezando a 2orecer en enero, febrero, que es invierno, cuando aún no es su momento", dijo el biólogo de 48 años.
González explicó que para establecer una correlación entre el cambio climático y la 2oración temprana de las jacarandas, su equipo necesita una muestra representativa y comparar las 2ores año tras año. Para hacer esto, ha comenzado a liderar a un grupo de jóvenes que están recopilando datos en toda la ciudad y utilizando imágenes de satélite.
Señaló que el aumento de las temperaturas hizo que el invierno en la capital mexicana terminara a principios de este año, a mediados de enero, en lugar de a Onales de marzo, cuando se supone que terminará.
ADAPTACIÓN
Encauciado por los cerezos japoneses que cubren Washington, D.C. en rosa y blanco cada primavera, el presidente mexicano Pascual Ortiz (1930-1932) se disisó a replicar el mismo paisaje en la capital de su nación.
Pero Tatsugoro Matsumoto, un arquitecto paisajista japonés que se estableció en México a Onales del siglo XIX, le dijo que no sobrevivirían al clima templado de la ciudad por mucho tiempo, por lo que abogó por las jacarandas, un árbol tropical del que había aprendido durante una breve estancia en Perú.
Desde entonces, el árbol se ha convertido en un elemento básico para los nueve millones de habitantes de la Ciudad de México.
En enero, la alarma se extendió cuando los usuarios de las redes sociales comenzaron a publicar fotos de jacarandas en 2or y comenzaron a preguntarse sobre los efectos del cambio climático.
"Como nunca antes (...) la gente ha empezado a decir 'esto es serio, es real' y ya no es solo un oso polar 2otando a la deriva'", dijo Cristina Ayala, bióloga y doctora en Ciencias de la Sostenibilidad.
"Es muy bueno que la gente esté empezando a ser consciente de lo que el cambio climático nos va a traer como habitantes de la ciudad", agregó.
Aunque no son nativos de México, para Ayala, las jacarandas cumplen una función importante para la ciudad. Atraen a más colibríes y abejas que muchos árboles nativos, por lo que un cambio en la 2oración podría conducir a una disminución de estas poblaciones.
"A uno le gustaría que las jacarandas 2orecieran durante todo el año, iluminan la ciudad", dijo Alex Estrada, residente de la capital mexicana, mientras observaba un árbol que estaba empezando a volverse morado. "Pero algo no está bien aquí: ¿jacarandas en invierno?" se preguntó.