Bariloche: Opciones para invertir en ladrillos y turismo
En la ciudad rionegrina crecen emprendimientos que se potencian con la oferta turística del lugar. Cuáles son las distintas categorías que atraen inversores.
La industria inmobiliaria en Bariloche está experimentando algunos movimientos, especialmente en el mercado de los condo hoteles, en donde existen distintas ofertas que, según los propios desarrolladores, ofrecen una rentabilidad superior a un inmueble tradicional.
Grupo Klover lanzó Patagonia III y IV, dos edificios de condominios ubicados dentro de Arelauquen Golf & Country Club, donde ya están funcionando otros dos complejos de las mismas características. “Desde el inicio del proyecto del barrio cerrado se pensó en destinar un sector de macrolotes para los condos”, explica Ignacio O’keefe, de la inmobiliaria responsable de su comercialización. Para O’keefe, uno de los motivos que empujan el éxito del negocio es la posibilidad de acceder a una propiedad en un lugar premium, en donde el ticket de inversión arranca en los US$600 mil. “Una casa en Arelauquen debe superar los 300 m2 y tiene normas de construcción muy estrictas. Una unidad de condominio, en cambio, puede adquirirse desde los US$ 280 mil con una financiación hasta en 24 cuotas”, detalla el empresario, quien agrega otra ventaja: “Los turistas pagan alrededor de US$300 por día el alojamiento en uno de estos departamentos, por lo que el propietario puede ceder su administración para alquiler temporario u ocuparse él mismo”. Según O’keefe, con once semanas de alquiler se obtiene la misma renta que en un departamento de Belgrano, durante un año.
Por su parte, Argenway, un operador de turismo receptivo, invirtió US$12 millones en el desarrollo del condo hotel Hampton –una marca del Grupo Hilton– que está en construcción a 150 mts del Centro Cívico. Lisandro Cristiá, director del emprendimiento, explica: “El hotel tendrá 105 habitaciones, y un inversionista puede comprar una unidad, media o hasta un cuarto. Una vez que esté operativo, recibe una rentabilidad sobre todas las utilidades del Hampton”.
La habitación cuesta US$ 135 mil, pero el ticket mínimo es de US$33.750 que pueden aportarse mediante un anticipo de US$10 mil y cuotas mensuales de $16.000. Cristá estima que la rentabilidad neta está entre el 7 y el 9%, el doble que un alquiler convencional. Los cálculos surgieron de estudios de factibilidad financiera realizados por consultoras independientes y por el mismo Hilton, “que presta el nombre a desarrollos que le aseguran un futuro exitoso”.
En el caso de Hampton, el propietario tiene un título de propiedad que cede en usufructo al fideicomiso durante 30 años. Éste se ocupa de la explotación turística y coordina con el propietario las semanas al año que éste quiere hacer uso de su habitación, quien cada tres meses recibe las ganancias obtenidas durante ese período.
Para Cristá, una de las principales ventajas es el atractivo que tiene Bariloche para los extranjeros: “Somos un grupo de turismo que hace 50 años trabaja en el rubro. Desde hace mucho tiempo traemos brasileños a Bariloche, que es una ciudad con una oferta interesante todo el año, no sólo en temporada de esquí”, reconoce.