Creadora de hábitats para la televisión
La arquitecta Julia Freid se especializa en proyectar decorados para unitarios, novelas y series televisivas. Cómo construye espacios ficticios a escala real. Su anécdota con Charly García. La experiencia en la cárcel.
Desde que en 1993 armó una carpa egipcia para el camarín de Michael Jackson ( estadio River Plate), la arquitecta Julia Freid no paró de crear módulos habitables para personajes de la tele. Por sus manos pasaron habitaciones, comedores, cocinas y celdas. Patios de familias tipo, asentamientos dentro de la cárcel de Caseros y jardines. Pero también, la casa de Diego Maradona,
en la calle Segurola, que cuando vio la cama con baldaquino y las telas blancas del camarín de Jackson la llamó para encomendarle la refuncionalización de los tres pisos de Villa Devoto. Después llegaron las casas a escala real de Los Roldán, Costumbres Argentinas, La Lola, Historia de un Clan y El Marginal, la serie por la que se llevó dos estatuillas
de los Premios Tato ( diciembre 2016), en las categorías Escenografía y Dirección de Arte.
–¿Cómo fue el trabajo en la cárcel de Caseros?
– Emocionante, mezcla de fascinación y horror. Ocupamos la planta baja para montar una villa en el patio central, el escenario del conf licto entre las bandas del unitario ( emitió la TV Pública). Se armaron las calles internas con cortinas, sábanas, media sombra, chapa, materiales plásticos, frazadas. Cada pared fue un mundo de materiales. Y logramos escenarios muy reales, donde peleaban las bandas. Lo más interesante fue la intervención realizada junto a Cecilia Erratchu para definir paletas cromáticas.
–¿Cuál es el punto de partida para el montaje de los espacios de acuerdo a los personajes?
– Construir desde un punto de encuentro, a partir de la historia del personaje. En Historia de un Clan, por ejemplo se alquiló una casa destruida y otra vez, se convocó a obreros para empapelar, instalar pisos e intervenir el jardín. En los muros mandan las
historias visuales, con fotos, medallitas, objetos personales.
– ¿El mayor desafío? – Los cuatro decorados de Fanny la fan, la tira que se está preparando en Telefé. Son situaciones distintas: un canal de TV ultra moderno, un loft, un hotel de vampiros y una casa que quedó en el tiempo.
– ¿Tu fuente de inspiración? – La realidad, siempre. Y mucho cine, más que nada. Tengo imágenes guardadas en una carpeta que se llama “decorados deseados a futuro”.
– ¿Un decorado pendiente? – El dormitorio de 2001: Odisea en el espacio ( Stanley Kubrick, 1968). Ojalá algún día pueda, esos pisos de acrílico eran impresionantes. Prefiero el cine de antes al moderno.
– ¿Cuánto suma ser arquitecta? – Todo. No podría ser escenógrafa si no fuese arquitecta. No hay otra manera de explicar el espacio y la composición.
– ¿Qué escala maneja la TV? – La real, y con la misma disposición de las viviendas. Antes se usaban tres paredes porque la cuarta era la cámara. Pero ahora las cámaras se esconden en techos y otros rincones. Y los decorados llevan materiales reales también: puertas de hierro, revestimientos. El cartón ya fue, las puertas ya no se mueven.
–¿Lo más difícil de conseguir? – Charly García pidió un pez para su participación en Viudas & Hijas del Rock & Roll. Lo convoqué a Fernando Poggio, que realizó un objeto en aluminio macizo, espectacular.
– ¿Tu rincón preferido? – Las mesitas de luz, que hablan de los personajes.
– Volverías a proyectar casas? – No ... implica mucha charla con el cliente … Mi cuenta pendiente es un museo. No volvería a lo hogareño.