Bodega boutique.
PROYECTO NACIONAL BODEGA SÓLO CONTIGO. Al pie de la cordillera, en el Valle de Uco, Bórmida & Yanzón proyectó una bodega boutique que recupera la tradición de las bodegas domésticas.
Sólo Contigo, un nuevo concepto de edificio enológico del estudio Bórmida & Yanzón.
Después de casi dos décadas de trabajo en bodegas grandes, que abrieron paso al turismo enológico con establecimientos icónicos que ponen en valor la identidad del lugar a través de una arquitectura del paisaje, nuestro estudio comenzó a realizar en Mendoza un nuevo tipo de proyectos, de escala menor, en los que desarrollamos los conceptos y lenguajes creados en aquellas obras anteriores.
Esta nueva modalidad de “bodegas boutique” elabora vinos de alta gama en establecimientos más pequeños que también reciben visitantes, por lo cual siempre buscan aportar variantes que las identifiquen dentro del elenco de las 180 bodegas visitables de Mendoza.
Bodega Solo Contigo nació de la iniciativa de los canadienses Terry y Noel Neelands, que ya eran inversores del Resort & Spa The Vines of Mendoza, situado en el Alto Valle de Uco. Al ampliarse el proyecto agrícola-inmobiliario de esta empresa con una “villa de bodegas”, decidieron redoblar la apuesta e iniciarse en el mundo del vino, construyendo su propio establecimiento.
El concepto rector del proyecto fue hacer una “casa-bodega” que recuperara la tradición de las bodegas domésticas, usuales en Mendoza hasta mediados del siglo pasado, cuando por efectos de la industrialización masiva los establecimientos perdieron atractivo para ser lugares de vida. Hoy, en cambio, la propuesta de una bodega integrada a una vivienda y destinada a la sociabilidad del vino, aparece otra vez como un objetivo muy deseable.
El programa integró 1.015 m2 de espacios productivos para elaborar y guardar 200.000 litros de vino y otros 435 m2 para vivienda temporaria. El conjunto se desarrolló en cuatro cuerpos conectados a nivel de terreno, con expansiones diferenciadas hacia espacios de trabajo vitivinícola y otros para disfrute de la naturaleza, con viñedos al pie de los Andes.
La bodega ocupa dos naves paralelas antecedidas por una galería de vendimia y separadas por un patio, que aloja estratégicamente los suministros enológicos y, a la vez, los oculta a la vista. La nave de elaboración tiene dos niveles, con una cava subterránea para conservación en barricas de roble. La otra tiene diferenciados los depósitos de insumos secos y de producto terminado, y el laboratorio. El fraccionamiento se terceriza con vehículos que estacionan en la misma galería de vendimia, que es el dispositivo de ingreso y selección de la uva, del prensado para vinos blancos y de despacho de botellas.
Lo más interesante y original de esta obra es la relación planteada entre la bodega y la casa, mediante un eje de proyecto que prolonga el corredor central de la nave hasta unirse con los espacios de degustación, el estar- comedor de la vivienda. Entre ambos se ha insertado una pieza pivote con puertas enfrentadas sobre el eje que permiten integrarla a la casa o a la bodega, o bien darle una continuidad total a las tres partes.
Esta sala de exposiciones de arte es un espacio cuadrado, de 10 por 10 metros, que mantiene el ancho de la nave y del estar, pero se eleva a 8 metros de alto y recibe luz solar por medio de una pirámide invertida de resina, que la difunde sin proyectar sombras.
La vivienda se articula en forma de L, definiendo el ámbito de ingreso de visitantes al conjunto. Un sector social vidriado mira a la montaña y se abre a una galería y a un patio jardín entre viñedos. Las dos suites están giradas, buscando intimidad, ocupando la otra ala, donde se expanden en terrazas cubiertas y la piscina.
Otros detalles de la obra son la materialidad y los espacios de sombra anexos a los interiores. Buscando identificarse con el terruño, los muros de la bodega son ciegos y gruesos, con gran inercia térmica. Están hechos con áridos del lugar y usan tecnología del hormigón hidrolavado. Por su parte, los paramentos de la casa son de hormigón visto pigmentado color tierra, con encofrado de tablas.
Las superficies, ricas en texturas, se ponen en valor con la intensa luz solar. Al mismo tiempo, las galerías profundas se resuelven con estructuras voladas y colgadas de acero crudo con rollizos finos de eucalipto, proyectando sutiles tramas de sombra. Estos recursos expresivos ofrecen experiencias ambientales propias de la región que hemos querido proponer en clave contemporánea.