Integración.
Alumnas de la Facultad de Arquitectura de Córdoba definieron un edificio para el programa académico y un bloque autónomo para actividades barriales. El rol del espacio público como articulador de los usos sociales.
Una escuela técnica proyectada en Córdoba vincula la actividad educativa con la comunidad.
Esta escuela está ubicada en San Martin, un barrio con mucha identidad pero que se encuentra actualmente degradado. El proyecto responde a un nuevo prototipo de edificios escolares que busca reflejar un cambio en la forma de enseñar y de aprender, pero también un cambio en la relación entre escuela y barrio.
No se trata de una tipología de claustro convencional, convergente a un patio central, sino una propuesta divergente en torno al espacio público al que el propio patio de la escuela se vincula directamente manteniendo una estrecha relación visual. De este modo, la escuela se configura en dos volúmenes alrededor de la plaza pública, en los que la circulación perimetral facilita el contacto del centro educativo con el barrio.
El volumen longitudinal, de carácter privado, es interceptado por el patio/hall que lo divide en dos sectores: el primero contiene al comedor, oficinas administrativas y biblioteca, mientras que el segundo, las actividades académicas, aulas teóricas y talleres flexibles con posibilidad de expansión a patios o espacios intermedios y vinculación entre ellas.
El segundo volumen, de carácter público, se ofrece al barrio cuando la escuela está cerrada y actúa como punto de referencia. Contiene el salón de usos múltiples y el auditorio. Finalmente, el espacio público no sólo se presenta como un ámbito de encuentro y socialización a nivel barrial, sino que incluye en su programa un cine al aire libre que promueve el desarrollo cultural.
En cuanto a la tecnología del proyecto, el sistema constructivo fue determinado por la rapidez de ejecución y la minimización de costos, utilizando hormigón prefabricado para la caja interior del volumen académico y estructura metálica para la circulación/filtro y el volumen que contiene los programas públicos.
Comentario de la cátedra
El trabajo de las alumnas propone una institución compacta en la manzana, diferenciando claramente los dominios públicos, semipúblicos y privados, claro en su posicionamiento. Define un edificio en barra para lo académico y un bloque autónomo para programas de relación directa con el barrio. Es el caso del salón de usos múltiples y el auditorio. Esta decisión permite tener actividades barriales simultáneas mientras tienen lugar las actividades académicas.
Este proyecto también pone un acento fuerte en la tecnología y las técnicas constructivas. Combina dos sistemas: una malla estructural metálica por fuera y otra prefabricada por dentro para el sistema de aularios. La primera malla es un dispositivo climático y de circulación perimetral exterior, esto cambia el concepto de las circulaciones ya que se dan en forma exenta y genera una nueva forma de programar los espacios de aulas con posibles combinaciones y expansiones interiores para el uso racional y expansivo del interior de la institución.
Los conceptos en sus inicios, sus premisas para el barrio, el alumno y las nuevas enseñanzas, no fueron abandonados en el momento de resolverlo programáticamente el planteo. Esto, a su vez, es apoyado por un sistema constructivo claro, empleado y pensado desde su inicio como un elemento y condicionante más de la resolución del proyecto más que como una resolución estética.
El proyecto responde a un nuevo concepto de edificios escolares que busca reflejar un cambio en la forma de enseñar y de aprender, pero también un cambio en la relación deescuela con el barrio.