EL PRODUCTO DE UN CLIMA CRÍTICO Y REFLEXIVO
Santa Fe genera expectativa e ilusión cuando hay que seleccionar trabajos para premiar o publicar. Quizás, porque desde hace muchos años la provincia aporta un alto nivel de propuestas sencillas, austeras, con recursos materiales primarios y tradicionales aplicados con oficio arquitectónico y racionalidad. Quizás, también, por el aporte de tres generaciones como la que componen Jorge E. Scrimaglio, Augusto Pantarotto y Mario Corea; Gerardo Caballero, Rafael Iglesia, José María D’angelo, Maite Fernández, Paola Zini, Josefina Caprile, Rubén Fernández, Ariel Jiménez, Rubén J. Palumbo y Agustín Perazzo y Nicolás Campodónico, Diego Arragaida; o los emergentes Pablo Anzilutti, Francisco Garrido, Javier Mendiondo y Federico Cairoli. O a un clima crítico y reflexivo en el debate cultural y colectivo de la Ciudad de Rosario que incluye a la Universidad y a las Escuelas de Arquitectura de la Provincia.
La presente selección de trabajos de la región que nos tocó fallar para el premio ARQ FADEA 2018, reafirma lo dicho con especial énfasis en la obra pública.
En obra privada la Casa entre Arboles es excelente y el jurado la ponderó. Destacamos también proyectos como Edificio Pequeño, la casa 2 Casas, Casas DL y ML o Casa con ladrillos, que son buenos proyectos, interesantes y aportan al nivel general.
La obra pública es de lo mejor de Argentina y la región. El CEMAFE realizada por la Unidad de Proyectos Especiales de la Secretaría de Arquitectura del Ministerio de Obra Pública de la Provincia de Santa Fe, la re funcionalización del ex Molino Marconetti y el edifico Nido Barranquitas Sur, proyectados y dirigidos por equipos pertenecientes a la Secretaría de Planeamiento Urbano son ejemplos de una obra pública de calidad, equipos con excelentes profesionales y con experiencia en este tipo de obra.«