POR UNA ARQUITECTURA MÁS COMPROMETIDA
Tengo 20 años y empecé a cursar el segundo año de la carrera en pandemia” arranca Guadalupe. Y cuenta que eligió la carrera porque combina muchas cosas que me gustan: el arte, el diseño, la historia y las tecnologías actuales. Asimismo, le seduce su amplitud, creatividad y su carácter multidisciplinar. “La forma de trabajo se plantea siempre de manera colaborativa, te nutrís de las ideas y el intercambio grupal para avanzar con tu propio proceso creativo, aprendés muchísimo todos los días de ese intercambio con compañeros y profesores”, detalla. Y continúa: “Es técnica, rigurosa y a la vez muy libre, podés llevar el proyecto por el lado que más te interese y de una misma consigna salen propuestas muy distintas según cómo lo encares”.
A futuro, se imagina “una arquitectura cada vez más comprometida con su impacto en relación con el ambiente y pensando en nuevas formas de habitar y convivir de manera sustentable”. En tanto, aprende mirando la obra obra del estudio MVRDV, entro otros: “Me interesa la variedad de proyectos que realizan, sus ideas y las distintas soluciones que presentan, su interés por modificar la ciudad, solucionar problemas actuales relacionados con la globalización y la vivienda”. Desde hace varios años participa de un taller de pintura, lo siente como un espacio de exploración de distintas técnicas y fuente de inspiración.