Puesta a punto de los equipos de aire acondicionado
Las principales recomendaciones para mantenerlos en buen estado de cara a la temporada de calor y asegurar el mejor rendimiento.
Con la llegada de la temporada de verano y los días de mayor demanda de climatización, el uso de los aires acondicionados comienza a ser cada vez más intenso y el mantenimiento previo es fundamental para lograr un correcto funcionamiento de estos equipos cuando más se los necesita.
La firma Johnson Controls aporta algunas recomendaciones destacando que el mantenimiento sea realizado durante todo el año y reforzarlo unos días antes de que comience el período estival. También, aconseja tomar una serie de medidas cuando termine la temporada más calurosa y los equipos dejen de utilizarse.
Primero los filtros
Una de las partes más importantes son los filtros, que se deben cambiar cada varios meses, siempre dependiendo del uso que se le dé al equipo.
Si los aires se utilizan de manera intensa, la recomendación es reemplazarlos con frecuencia. En cambio, si solo se encienden de manera esporádica, se pueden sustituir cada dos años. Aunque, en ese caso, habrá que limpiarlos de manera continua. Así se logrará conservarlos en buen estado y estirar su vida útil.
El cambio de los filtros, así como su extracción para limpiarlos, es un proceso muy sencillo. En general, no presenta dificultades, pero hay que extraerlos y colocarlos con precaución para no romper los enganches que los fijan en su lugar.
Exterior, condensador y rejillas
Por otro lado, cuando se hacen las tareas de conservación del aparato, es común olvidarse de su unidad exterior. Pero, para evitar fallas de funcionamiento, también hay que revisarla.
También se debe corroborar que la unidad no esté bloqueada por algo que haya caído sobre la misma o que han colocado demasiado cerca de su parte frontal. Ya que, si la unidad no tiene suficiente espacio para que el aire caliente que expulsa pueda salir sin obstáculos, el condensador se puede bloquear.
Otro aspecto crucial es revisar el nivel de gas, ya que por ese motivo el aire suele enfriar menos de lo que debería, o de repente empieza a gotear en el interior de la casa.
Por otra parte, en algunas ocasiones, una instalación eléctrica deficiente puede provocar un daño de los sistemas que están conectados a ella. Por lo tanto, debe corroborarse que los cables, como así también los enchufes, se encuentren en buen estado.
A su vez, la limpieza de las rejillas es otro factor indispensable al cual no se le suele dar la debida importancia. Para esa tarea, hay que extraerlas de la unidad. Porque hacerlo en el propio aparato es bastante más incómodo, y además no suelen quedar higienizadas de manera correcta.
“El aire acondicionado, cuando se utiliza solo para refrigerar y no para calentar el ambiente, suele ser un equipo muy estacional, por lo que, de la misma manera que ocurre con las estufas en invierno, requiere de ciertos cuidados y mantenimiento, durante el año o los días previos, como para que en el momento de su uso intensivo, esté en buenas condiciones y pueda auxiliarnos de los calores extremos”, señaló Daniel Sandoval, gerente de Marketing de Johnson Controls para Latinoamérica. «