La Unión de Arquitectos de Catamarca, de festejo
En 1983, la entidad pudo independizarse del Colegio Profesional de Agrimensores, Arquitectos e Ingenieros y fue la primera del país en formar colegiatura.
La historia de la Unión de Arquitectos de Catamarca se remonta a 1980. Fue entonces que la Federación Argentina de Sociedades de Arquitectos (FASA), en la gestión de Francisco García Vázquez y Lino Campos -este último, catamarqueño-, impulsó como objetivo de su gestión la conformación de los colegios provinciales. De esta manera, los profesionales de la provincia decidieron trabajar para que la asociación civil creada en 1975 se constituyera como colegio y lograra independizarse del Colegio Profesional de Agrimensores, Arquitectos e Ingenieros. El objetivo se concretó por medio de la Ley N° 3945 sancionada en 1983. Es así que la entidad, que fue la primera en conformar colegiatura en el país, llegó ahora a su cuarenta aniversario.
Según sus directivos, la conformación de la UAC tuvo gran importancia social y política porque en ese momento la función y el deber del arquitecto no era asimilado socialmente en la provincia. En los primeros años hubo que construir la imagen del arquitecto en Catamarca, dado que hasta ese momento la matrícula era muy pequeña. Para dar a conocer la labor profesional, se organizaban exposiciones y se realizaban trabajos gráficos en plazas y barrios.
Pero el cambio fundamental fue que como sociedad civil dependía de la Dirección de Personas Jurídicas y después de la sanción de la Ley comenzó a trabajar como un brazo del Estado dependiendo ya del Poder Ejecutivo y Judicial y por lo tanto empezó a controlar la matrícula y regular honorarios.
Hoy, el colegio es un órgano de consulta que nuclea a personas especializadas en mejorar el urbanismo de las ciudades, en optimizar los recursos, en crear un mejor hábitat y que éste sea más justo y equilibrado, que no genere diferencias sociales que pueden ser violentas.
Entre los objetivos de la UAC está lograr que la gente de distintos estratos sociales acuda al profesional para construir o remodelar sus casas, no solo para grandes proyectos; construir una ciudad que se asemeje “a lo que la comunidad se merece”, fomentando la sostenibilidad en todos los niveles -urbanístico, planificación del crecimiento urbano, espacio público, circulaciones- para no agotar recursos.
La UAC se ha manifestado en contra de la construcción de grandes edificios con fachadas vidriadas, “que se copian de otros lugares del mundo sin tener en cuenta que en la ciudad demandan enormes gastos de energía para el acondicionamiento de los espacios”.
Para los directivos de la UAC “Lentamente se va tomando conciencia de las necesidades de responder a estos nuevos retos como asumir la identidad, usar materiales del lugar y tecnologías de la región. Por caso, en la provincia hay arquitectos que están trabajando en la construcción con adobe y eso implica que hay también un comitente concientizado en que construir con técnicas regionales es lo óptimo.
Fomentando la interacción con otros colegios del país, y por qué no a modo de celebración, los pasados 22 y 23 de junio, la ciudad de San Fernando del Valle de Catamarca fue sede de la segunda reunión del año de la Federación Argentina de Entidades de Arquitectos (FADEA). «