Experimentación volumétrica: cajas para casas
Dos viviendas proyectadas por el estudio platense están morfológicamente definidas por su propio nombre -Cajas Articuladas y Cajas Macizas- y recrean la idea de contenedor.
El estudio de arquitectura Paralelo Colectivo se fundó en 2014 en un pequeño espacio ubicado a 200 metros de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de La Plata. “Era el lugar donde día, tarde y noche pasábamos el tiempo hablando de arquitectura, fabricando teoría, participando en concursos de estudiantes y, si sobraba el tiempo, realizando las interminables entregas de los talleres de arquitectura y, porque no, a veces, también festejando”, recuerdan Rodrigo Ballina Benites, Valentín Ayala y Luciano Del Valle, socios del estudio.
Los tres hacen foco en el espacio ampliado de participación colectiva en donde “amigos, compañeros, colegas y no tanto le dimos forma a un incipiente espacio cultural de actividad variada muchas veces ‘paralela’ a la práctica arquitectónica, situación que le fue otorgando forma al nombre del estudio”, explican.
Con el tiempo, se mudaron a una casona antigua en el barrio de la estación de trenes de la ciudad, donde sucedieron también eventos musicales, culturales, exposiciones, talleres de lectura y cine a la par del inicio de la práctica profesional orientada a la arquitectura. Cuentan que durante los primeros años, lograron plasmar algunas obras de importancia, al tiempo que obtuvieron distinciones en concursos internacionales y nacionales en Argentina y España.
“En 2021 obtuvimos nuestra mayor distinción hasta el momento, y al mismo tiempo especial ya que se dio en el ámbito de nuestra ciudad, el Primer Premio para la llevar a cabo el Centro de Convenciones Distrito Tecnológico de la ciudad de La Plata”, agregan.
Hoy, el taller de Paralelo Colectivo está emplazado en un container marítimo acondicionado como estudio, “posado sobre una losa furtiva en algún emplazamiento lejano de la localidad de City Bell, alejado del ruido de la ciudad, intentando crear un ámbito propicio para la práctica proyectual experimental. Desde allí seguimos participando incansablemente en concursos, al mismo tiempo que alternamos en el desarrollo de proyectos y obras de variada escala y condiciones programáticas”, develan.
Cajas Articuladas
Los arquitectos eligieron dos casas como ejemplo de su producción más reciente. Las dos, en La Plata. La primera, construida en 2020, se ubica en el casco histórico de la ciudad. Según cuentan, el encargo consistió en la ampliación y rehabilitación completa de una vivienda cuya distribución espacial no era acorde para la conformación de una familia contemporánea.
Una de las premisas a lograr con
sistía en la ampliación de los espacios comunes de la vivienda. Además, la antigua cocina, una especie de tapón hacia la expansión del patio del fondo y muy poco iluminada, se había convertido en un obstáculo. “Toda la casa, ensimismada en su interior, resultaba oscura y desarticulada con el afuera”, definen.
El estudio pensó como solución un elemento arquitectónico estereotómico que se encastrara a la preexistencia y, al mismo tiempo, aparentara surgir de la tierra contundentemente, casi como una piedra pulida. “Es por esto que la materialidad elegida fue un gran tabique de hormigón armado, con un particular encofrado de chapa ondulada el cual le otorgaba una singularidad única. Esta caja de piedra fue agujereada a partir de la necesidad de una relación franca con el exterior”.
La nueva cocina pasó a funcionar como el elemento articulador que vincula la casa con ambos patios. La caja preexistente, típica de la tipología de “casa cajón”, comprende el sector que se relaciona con la calle. Mientras que la nueva caja articulada le devuelve a la vivienda su relación con el fondo, el espacio exterior de relación privada, interna. Un lugar propio para la familia conformada por una madre y sus tres hijos.
Cajas Macizas
Un año antes, en 2019, Paralelo Colectivo planteó esta casa en las afueras de la ciudad. El encargo consistió en la construcción de una vivienda unifamiliar de dos habitaciones en donde pudieran desarrollar su vida diversas conformaciones de familias de cuatro personas.
“Una de las ventajas que nos otorgaba la posibilidad de trabajar en este contexto urbano era la posibilidad de contar con tres caras libres y retiros, tanto de línea municipal como del eje medianero, que creaban una atmósfera amigable”, describen.
Al mismo tiempo, a este primer encargo le siguieron dos más. Así, con esos tres casos en simultáneo dentro del mismo barrio cerrado, se les abrió un camino de experimentación en torno a la vivienda periurbana de perímetro relativamente libre: la serie de casas Mitre 1, Mitre 2 y Mitre 3, que fueron tomando programas similares con partidos diversos que se fueron moldeando a partir del entendimiento de las condiciones del entorno, la orientación y la escala.
“Se pensó en un elemento arquitectónico arquetípico morfológico que remite a la forma histórica del hogar. Para a partir de él, desandamos un camino de experimentación material y volumétrico generador de los espacios habitables”, explican.
En el caso de Cajas Macizas - Mitre 1, esta experimentación se fue generando a partir de la creación de dos cajas macizas de ladrillo común, que en su superposición resuelven, acceso, patios, orientaciones y partido. Existió una experimentación de disposiciones y trabas diversas que el material nos permitió, para otorgarle al conjunto singularidad.«