para limpiar las cavidades nasales
Otra excelente opción es mantener las vías respiratorias despejadas es la ducha nasal, una práctica oriental muy provechosa para estos tiempos de polución ambiental. Para realizar esta práctica se necesita una jarra neti, a la venta en casas naturistas, o una pequeña tetera. Se calientan dos tazas de agua, preferentemente destilada a 37 grados C y se disuelve media cucharadita de sal en ella; luego se vierte esta solución en la jarra neti. Eche la cabeza hacia un lado e inserte un pico de la jarra neti en la fosa nasal que ha quedado arriba. Permita que el agua penetre naturalmente y cuide de no inhalar si el agua no pasa porque los conductos nasales están tapados, deje de echar agua por un momento y aspire suavemente; cuando el agua llegue a la boca, escúpala. Repita el procedimiento con la otra ventana nasal. Cuando termine el procedimiento completo, tápese alternativamente las fosas nasales y exhale con fuerza; se sorprenderán al ver la cantidad de desechos queue pueden salir. Naturalmente, si no dispone de una jarra neti, este procedimiento puede realizarse con un frasco gotero común.
Pablo de la Iglesia, naturópata y Patricia Robiano, licenciada en nutrición.