LACTOCERELIANOS
Cuando la leche no es excluida de la dieta alimentaria
Beneficios y alternativas a los lácteos en nuestra alimentación
La leche y sus derivados han estado en el centro del debate. Estudios que indican que es fundamental para nuestro owrganismo versus investigaciones que hablan del peligro de consumirla todos los días.
En el mundo vegetariano el debate también está presente. Sabemos que los vegetarianos, a diferencia de los veganos, son quienes optaron por llevar una alimentación sin carne animal, pero incluyen en su dieta los lácteos y sus derivados. Así, dentro de la gran familia vegetariana, hay quienes ponen el foco en los lácteos y los cereales: éstos son los lacto-cerelianos. Pero ¿qué beneficios y qué riesgos hay al consumir leche de vaca?
Conversamos con la nutricionista chilena Marcia Basulto sobre esta temática.
Doctora ¿Por qué siempre nos dicen que debemos consumir leche, durante toda nuestra vida, si lo natural es que nuestra madre produzca leche sólo en los primeros años de nuestra infancia?
Si bien la leche materna es esencial y es el mejor alimento que recibimos durante los primeros años de vida, estudios científicos han demostrado que el aporte de calcio de la leche de vaca previene enfermedades óseas y otras carencias, que si bien hoy en día hay bastante controversia al respecto, falta evidencia científica al respecto para poder fundamentar en base a la evidencia lo contrario. Hay diversos factores que llevaron a la leche como un alimento indispensable. En 1930, por ejemplo, comenzaron políticas sanitarias como agua potable y el programa para bajar las tasas de mortalidad por desnutrición, entonces la leche formó parte de la entrega de alimentos por parte de los gobiernos junto a otros alimentos, para cubrir gran parte de la energía que debían consumir niños/as y embarazadas, además que en ese tiempo la lactancia materna no era tan promovida como ahora. Hoy se sigue entregando leche de vaca en los consultorios, formando parte fundamental en la dieta alimentaria de muchas personas pobres del país. Y aunque si bien de la desnutrición nos pasamos a la obesidad, las guías alimentarias y las condicionantes sociales de la población influyen directamente en la alimentación de una población. Entonces, en conclusión hoy podemos hablar de nutrientes, hablamos de calcio, y parte de la población sabe que ya no es necesario tomar leche de vaca para obtener calcio, pero sigue siendo un nutriente esencial en etapas de desarrollo y crecimiento.
Dentro de la amplia gama de estilos alimenticios, hay quienes optan por dejar a un lado los lácteos y sus derivados ¿Se pueden obtener los mismos beneficios de las leches vegetales?
Existe controversia científica al respecto, no hay consenso, sin embargo existen estudios que señalan que ciertas enfermedades como asma, enfermedades respiratorias o síntomas de intolerancia o alergia a la leche de vaca, disminuyen los síntomas dejando las leches y sus derivados. Como profesional recomiendo que siempre es necesario evaluarse y ver qué alimentos le hacen mal a cada persona, no generalizar. Continuando tu pregunta, las leches o lechadas vegetales son más nutritivas cuando son fortificadas, ya que el contenido de ácido fítico
(ácido orgánico que contiene fósforo, presente en los vegetales, sobre todo en semillas y fibra), saponinas, ácido oxálico, etc., inhiben la absorción del mismo calcio. Un ejemplo de esto es la leche de almendras casera, el contenido de fitatos que trae no deja que se absorba el calcio, hierro y zinc de ella, por eso es necesario asesorarse y aprender a hacer las leches para mejorar su calidad nutricional, pero sabiendo que éstas no reemplazan una leche maternizada o fortificada.
¿Qué consejo se le puede dar a una persona que ha decidido ser vegetariana por un tema de respeto hacia los animales, pero que aún sigue consumiendo lácteos? ¿Cómo podría dar el paso a dejar los lácteos en su vida?
El consumo de leche y derivados es un tema ético, donde me sumo como profesional, y tenemos muchas alternativas para cubrir las necesidades de nutrientes y de calcio. Aquí lo más importante es asesorase con un experto, ya que todas y todos tenemos necesidades distintas. Primero que todo, si una persona lleva una alimentación vegana/ vegetariana, debe asesorarse, puesto que no es solo quitar la carne o derivados del plato, sino que debe aprender técnicas para mejorar la biodisponibilidad, además de cubrir requerimientos personales. Luego, ir reemplazando los alimentos por las alternativas veganas y marcas que hay en el mercado, donde tienen unos quesos a base de semillas y frutos secos, también hay venta de yogures de soja, o bien puedes hacerlos en casa a base de espesante, semillas, probióticos, entre otros. Lo mismo pasa con las leches vegetales o de soja, las pueden conseguir en tiendas del rubro. Pero lo más importante de todo es llevar un estilo de vida saludable; realizar ejercicio, aumentar el consumo de frutas, verduras y bajar o eliminar el alcohol, el tabaco, las drogas, tomar sol entre 15 a 30 minutos antes del medio día para obtener vitamina D, consumir algas que son ricas en aminoácidos, magnesio, fibra, calcio y son muy económicas, entre otras cosas que aportan a nuestro organismo a llevar un estilo de vida más saludable.
LECHE + CEREAL ¡EXPLOSIÓN DE SABOR Y NUTRIENTES!
Dentro de la gama de las leches y lechadas están las hechas a base de
cereal. Una combinación que, más allá de su exquisito sabor, aporta nutrientes a nuestro organismo y que podemos hacer en casa, con paciencia y dedicación.
Algunas de las leches realizadas con cereal más comunes son:
Leche de soya: esta leche es rica en proteínas y vitaminas del grupo B. Su consumo disminuye los triglicéridos y el colesterol.
Leche de avena: es una de las leches más completas, contiene hidratos de carbono, vitamina B1, B2, E, D, niacina, carotenos y azufre, además de calcio, fósforo, potasio, sodio, hierro, magnesio, cobre y zinc.
Leche de arroz: tiene propiedades depurativas e hipotensoras. Se puede preparar a partir de la fermentación de granos de arroz molidos.
¿CÓMO PREPARAR LECHE VEGETAL EN CASA?
La forma más común es remojando en agua los frutos secos, semillas o cereales con el fin de ablandarlos. Cuando ya están blandos se deben triturar en la licuadora y la mezcla obtenida se filtra con un colador.
El consumo de leche y derivados es un tema ético, donde me sumo como profesional, y tenemos muchas alternativas para cubrir las necesidades de nutrientes y de calcio. Aquí lo más importante es asesorase con un experto, ya que todas y todos tenemos necesidades distintas.