“NUNCA DEJARE MI TRONO EN LA MODA”
ANNA WINTOUR: PREMIADA Y AMENAZADA
Famosa por su talento único a la hora de “vestir a la moda”, por su fría y caprichosa manera de tratar a la gente, por sus corte de cabello Bob (que lleva desde los 15 años), por sus lentes estilo Wayfarer y sus trajes Chanel, Anna Wintour (68) es una de las mujeres más poderosas del mundo fashion. Editora de Vogue americana desde 1988 nada sucede sin que ella haya dado el visto bueno. La mujer que cada mañana se levanta a las 6, juega al tenis y tiene tres asistentes que la acompañan hasta las diez de la noche cuando se va a dormir, gana dos millones de dólares al año, tiene un Mercedes con chofer a su disposición las 24 horas del día y dispone de 200 mil dólares al año para sus compras personales, recibió la condecoración por sus servicios a la moda de “Dama del Imperio Británico” de manos de la reina Isabel II. Impecable y orgullosa, como siempre, la mujer que nació en Londres pero que desde hace 30 años vive en Nueva York, retiró su distinción y, en lugar de celebrar, sonrió ante la cámara y despotricó en la intimidad. Es que Anna está furiosa porque en la Vogue británica nombraron, por primera vez en su historia, un director (o sea un hombre) y encima, de color. Edward Enninful (45) fue modelo, luego un estilista muy renombrado entre las celebrities y desde 1991 trabaja en magazine de moda. Sus elecciones rápidamente se convierten en tendencia y ya suma 485 mil seguidores en Instagram. Dicen que en la redacción de Vogue Nueva York corrieron ríos de tinta y ahora se vienen de sangre. Anna, que siente amenazado su trono indiscutido, dijo que hasta ahora, “Sólo odiaba a los pelirrojos pero a partir de hoy creo que sumaré otro color a mi lista de no queridos…”