“ME DARIA CELOS VER A ORI CON OTRO”
JULIAN SERRANO Y SU NUEVA VIDA SIN LA HIJA DE FULOP
Sonríe y mezcla ironía en sus respuestas. Contesta con humor y se permite bromear a pesar de las circunstancias. Julián Serrano (23) se expresa optimista, como si nada pudiera borrar su alegría ni opacar el prodigioso presente laboral que por estos días está atravesando. Ni siquiera su reciente separación de quien fue su pareja durante los últimos tres años, Oriana Sabatini (21). Todavía exaltado, tras debutar en el mítico Teatro Opera con “Esta es mi Historia”, un novedoso show donde recorre su vida a través de la música, el referente “teen” habla de un antes y un después en su carrera.“Es una forma de agradecer a mis seguidores todo lo que me dieron estos años. En un teatro tan importante y con todo lo que eso significa. Recuerdo cuando salía de hacer “Aliados”y veía el Opera. Hacerlo realidad fue algo increíble”, resume tras el exitoso debut en calle Corrientes con localidades agotadas y a horas de su presentación, el 19 de julio, en el teatro Broadway de Rosario.
Relajado y por momentos disperso, mientras espera en los sillones de la productora “Club Media Network” donde en minutos conversará con CARAS, revisa su celular. “Lo uso todo el día, soy celulardependiente. Duermo con el aparato cargando al lado. Es más probable que me olvide la cabeza al teléfono en algún lado. Es una adicción”, lanza con picardía.
Soltero desde hace poco más de un mes, estadío del que asegura aún no haber atravesado el duelo porque “todavía es todo muy reciente”, explica que los motivos de su ruptura con la hija de Catherine Fulop fueron de mutuo
acuerdo.“Estábamos todo el tiempo juntos y necesitábamos estar solos. Hoy me sirve para conocerme mejor. Lo necesitaba. Cuando estaba en pareja pensaba: “¡Qué bueno sería estar soltero!” Pero no sé si maduré o qué pero ya no me mueve salir los fines de semana. Estoy muy tranquilo y disfruto de mi tiempo leyendo un libro o mirando una buena película”, explica. Y, sin salir de su asombro, confiesa: “Apenas se enteraron que estaba solo me empezaron a escribir chicas que antes no me escribían. Mujeres lindas, modelos. Pero quedó en eso nada más. Desde que me hice conocido reconozco que me volví pésimo para encarar a una mina. Y si viajo a un país donde no me conocen y tengo la oportunidad de chamuyar .... no sé hacerlo, no funciono, se me fue el chip. Empezar de cero es más dificil”.
Como buen libriano, se reconoce enamoradizo a pesar de que sólo tuvo dos noviazgos formales y admite que para que haya “feeling” con una mujer, entre otras cosas, la atracción fisica es un factor determinante.“No me pondría de novio con una chica con la que no tenga piel; considero que el sexo es algo primordial en cualquier vínculo. Nunca lo vi como un tabú. Tampoco estaría de novio con una persona sólo porque es linda o me atrae, tiene que pasarme algo más”, argumenta. Y rápido recuerda que cuando recién llegó de Paraná, su ciudad natal, a Buenos Aires, tenía “levante” con los hombres.“Una vez en un boliche se me acercó un chico que estaba rodeado de modelos y pensé ¡Wow qué ganador que es, qué envidia! Y me empezó a hablar. Me pareció re copado el chabón y me invitó un trago en la barra. Resultó que me quería levantar”, rememora sonrojado.
“Ori me decía todo el tiempo de ir a bailar juntos pero yo prefería ir con mis amigos. Aún nos escribimos”.
Si bien los trascendidos señalan que su ex pareja ya tendría un nuevo romance con el reconocido futbolista de la Juventus y la Selección Nacional, Paulo Dybala, Serrano lo vive con naturalidad. Asegura que con Oriana todavía hay diálogo “Porque no terminamos mal” y, sin vueltas, admite: “Me daría celos verla con otro chico. Uno siempre se entera esas cosas antes por la prensa, porque a los dos minutos lo levantan en todas las redes sociales, es inevitable. Siempre se lo dije: “Cuando estés sola te van a escribir todos los chabones. Vas a tener una fila de 45 mil chicos.” Y cuando nos separados dije: ya está...”.
Aunque cosecha un público mayormente femenino, el multifacético YouTuber no se da por aludido ante el rótulo de galán.“Me gusta seducir. Pero no me considero un seductor o galán. Lo mío va por el chico de barrio simpático, buena onda. Siempre apelé al humor”, explica tras sortear con carisma y actitud los últimos flashes de un desafiante “shooting” fotográfico. Con la frescura propia de sus 23 años, aunque más maduro como hombre y como persona, el joven, que actualmente se encuentra grabando la tira “Golpe al Corazón” junto a Sebastián Estevanéz, hace catarsis sobre su reciente ruptura amorosa y, reflexivo, desliza: “Ori me decia todo el tiempo de ir juntos a bailar pero yo quería estar con mis amigos. Era un detalle que quizás hubiera estado bueno. Tampoco tengo tantas cosas para replantearme. La pasábamos muy bien y no discutíamos casi nunca”.
“Siempre me fijé en las morochas de ojos verdes. Pero no saldría con alguien sólo por su belleza”.