“SE FUE RODEADA DE AMOR”
ALVARO Y FRANCISCO DESPIDIERON A SU MADRE, MARIA JULIA ALSOGARAY
Tras varias semanas internada en el Sanatorio Otamendi, María Julia Alsogaray falleció víctima de un cáncer de páncreas. Sus hijos, Alvaro Javier (41) y Francisco Luis Erize (37), permanecieron a su lado hasta el momento de su deceso. La ex funcionaria de Carlos Menem (87) e hija del histórico dirigente y fundador de la UCEDE, Alvaro Alsogaray, tenía 74 años y había ingresado a la clínica por una hemorragia digestiva.
“Sabíamos que tenía una enfermedad, pero se fue un poco más rápido de lo que creíamos. Mi hermano y yo vivimos en el exterior y nos instalamos nuevamente en el país para poder acompañarla. Estamos contentos de haber podido estar a su lado cuando murió. Se fue rodeada de amor”, aseguró Alvaro.
Desde las 9 de la mañana del lunes 25, familiares y amigos se acercaron a las Sala Velatoria Malabia, ubicada en el barrio porteño de Palermo, para despedirla. Sus hijos permanecieron junto al féretro de su madre y presidieron la emotiva ceremonia de despedida que contó con la presencia de las treinta personas más cercanas al círculo íntimo de Alsogaray. “Los funerales son para los vivos, no para los muertos, así es que el que quiera vendrá y el que no, todo bien. Llegará la gente que la aprecie”, se limitó a decir el mayor de los hermanos, a su arribo al lugar.
Cerca del mediodía se llevó a cabo el entierro en la bóveda familiar del Cementerio de la Recoleta. Hasta allí se acercaron alrededor de 100 personas, entre las que se encontraban sus hermanos Alvaro y Eduardo, sus íntimas amigas, María del Carmen Prado, María Rosa y Teresa Aroche; el empresario Cristiano Rattazzi, la diseñadora Elsa Serrano, Julio Pereyra de Olazábal, José Antonio Romero Feris, el estilista Diego Impagliazzo y su
“Sabíamos que tenía una enfermedad pero se fue más rápido de lo que creíamos. Mi hermano y yo estuvimos a su lado cuando murió.” (Alvaro Javier Erize)
ex esposo y padre de sus dos hijos, Francisco Erize (74).
María Julia Alsogaray nació el 8 de octubre de 1942 en Buenos Aires. “Julita”, como la llamaban sus más cercanos, fue educada en el Colegio Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús y estudió Ingeniería Industrial en la Pontificia Universidad Católica Argentina Santa María de los Buenos Aires (UCA), como su padre. Inteligente y decidida, desde chica cargó sobre sus espaldas con el trauma de ser “hija de”, hasta que en 1989 se sumó al gobierno de Menem y logró ocupar un lugar en el centro de la escena.
Fue interventora de Entel durante el proceso de privatización y secretaria de Medio Ambiente, hasta que el fin del menemismo la encontró envuelta en numerosas causas de corrupción. Sumó ocho juicios y condenas a prisión por once años. En soledad, afrontó 22 meses de cárcel y un año y siete meses de arresto domiciliario.
Quienes la conocían bien aseguran que era rígida y esquemática pero que con la llegada al poder suavizó su perfil, tal como lo demostró al posar para la recordada tapa de “Noticias”, en julio de 1990. Retratada por el fotógrafo Osvaldo Dubini, la, en ese entonces, funcionaria se mostró insinuante, luciendo sólo cubierta por un tapado de piel. “Nunca me vi tan bien, ésa es la verdad, pero cometí un error político”, dijo sobre la recordada publicación que rezaba en su portada: “Reina pero no Gobierna”.
Amada por pocos y odiada por muchos, se ganó el mote “Dama de Hierro” y era comparada con la ex primer ministra británica, Margaret Thatcher. “El rol de mujer dura no me disgusta”, confesó.
Referente de una época, María Julia Alsogaray fue la única funcionaria menemista condenada y vivió sus últimos años recluida en su departamento de Recoleta. Solía comer con amigas e iba a misa todos los domingos a la Iglesia Las Esclavas. Con sus hijos radicados en el exterior, la ex funcionaria mantenía a diario largas charlas vía Skype con ellos.