Enfermedades del corazón
Las enfermedades del corazón provocan en el país, la muerte de una persona cada siete minutos. Se estima que anualmente se producen unos cincuenta mil infartos que a su vez son responsables de gran cantidad de decesos.
La mortalidad por enfermedades del corazón, provocan la muerte de alrededor de setenta mil argentinos por años y particularmente se estima que se producen unos cincuenta mil infartos por año, aunque la cifra podría ser aún mayor ya que un alto porcentaje de las personas no son registradas debido a que muchas mueren antes de llegar a recibir atención médica, por lo que se insta a seguir tomando conciencia sobre la importancia de la prevención, a partir del control de los factores de riesgo y de trabajar para actuar en forma inmediata ante la presencia de los primeros síntomas de un evento coronario.
Entre los principales síntomas que podrían indicar la presencia de un dolor de origen cardíaco, los especialistas destacan el dolor en el pecho generalmente de tipo opresivo, sensación de desasosiego y de muerte inminente, algunas veces sudoración, mareos e hipotensión en el caso de una oclusión total del vaso coronario que desencadena un infarto agudo de miocardio. Generalmente en cuadros menos graves de dolor coronario aparece al efectuar alguna actividad física y se alivia con el reposo. Pero también puede surgir como resultado de emociones intensas, estrés, calor o frío extremos y luego de una comida en la que la ingesta haya sido absolutamente desmedida. Incrementa las probabilidades de padecer un evento coronario la presencia de algunos de los factores de riesgo. Entre ellos están aquellos que no se pueden modificar, como la genética, la edad y el género, mientras que entre los factores modificables, los más importantes son la hipertensión arterial, la diabetes, el tabaquismo, la hipercolesterolemia, el sedentarismo, la obesidad y el estrés. Es importante llevar una vida sana, visitar con periodicidad al médico y controlar estos factores de riesgo. Está demostrado que poseer elevados dos o más factores de riesgo multiplica las chances de padecer un episodio coronario. Las mujeres tampoco están exentas de la enfermedad coronaria ya que mueren por esta causa 6 veces más mujeres que por cáncer de mama y en gran parte se debe a la falta de conciencia y de sospecha, tanto en la población como en el propio cuerpo médico, sobre la enfermedad coronaria femenina. La mujer, en general, consulta menos y lo hace con los síntomas más avanzados y muchas veces la atención médica subestima el cuadro y no actúa con la celeridad que correspondería. Todavía es muy alto el número de personas con síntomas de infarto que no llegan a recibir atención médica o que cuando llegan ya es tarde. Hay que tener en cuenta que cuanto antes el paciente reciba un procedimiento para restablecer el flujo sanguíneo en la arteria obstruida, idealmente mediante la realización de una angioplastía o cuando no se disponga de una sala de hemodinamia, la aplicación de fármacos antitrombóticos hasta tanto se pueda hacer la angiolastía, mucho mejores serán las chances de sobrevida y la calidad de vida posterior de esa persona.