“ES EL PRINCIPE DE MI VIDA”
FLAVIO MENDOZA Y SU BEBE DIONISIO
Hace un mes y medio que Flavio Mendoza se olvidó de las agujas del reloj, como si el tiempo se hubiese detenido desde el 12 de abril cuando nació su hijo Dionisio en Orlando. “Nunca dormí tan poco, a veces no sé si es de día o de noche pero no me importa. Estoy explotado de amor con este bombonazo. Me encanta hacer colecho con él. Termino todo contracturado pero amo tenerlo encima hasta que se duerme y lo pongo en el moisés que está pegado a mi cama. No tengo niñera porque me gusta hacerme cargo de todas sus cosas. Sólo me ayuda mi hermana Marcela cuando me voy por pocas horas a los ensayos de ‘Siddharta’”, cuenta sobre la nueva obra que dirige con Karina “La Princesita”, Facundo Mazzei y Osvaldo Laport como protagonistas.
Flavio habla con la satisfacción de quien superó todas las adversidades. Dice que todo le resulta fácil: cambiarle los pañales, darle la mamadera con leche de fórmula o bañarlo. “Fue mucho tiempo de sacrificio. Hace cinco años quise adoptar y no pude por la burocracia. La búsqueda de la paternidad por subrogación de vientre empezó hace más de tres años. Ojalá las leyes de adopción cambien en Argentina ya que dentro de dos años quiero la nena”, confiesa y explica el motivo de la elección del nombre Dionisio: “Así se llamaba un señor que trabajaba de caballerizo en el circo donde me crié. Él siempre me decía: ‘Los únicos sueños que no se cumplen son los que no se sueñan’. Eso me quedó grabado a fuego, él me marcó”.
El coreógrafo hace una pausa en su relato, mira a su pequeño moverse y agrega: “Es muy tranquilo pero ya se nota que heredó mi carácter fuerte. Físicamente es parecido a mi hermana Silvina que vive en Tucumán y es rubia con ojos claros. Dionisio tiene genes gringos como mi papá”. Una belleza que ya atrajo a los productores de Netflix, quienes le propusieron hacer un documental con la historia de su hijo. “Aceptaría esa propuesta para que se conozca todo lo que abarca la maternidad por subrogación de vientre. Porque no es elegir el color de pelo y ojos del bebé como cree la gente. Es más complejo, es una posibilidad gigante para las personas que no pueden ser padres de otra manera. Nunca lo haría con fines de lucro”, asegura Mendoza a la vez que aclara que está más soltero que nunca. “Soy re Susanita pero jamás tuve suerte en las relaciones amorosas. Sin embargo, con Dionisio siento que todo se acomodó, que llegó el príncipe de mi vida, mi ángel. No significa que él suplante el lugar de una pareja pero hoy ocupa todo mi amor”, concluye mientras observa a su bebé dormir plácido en sus brazos.
“Dionisio es muy tranquilo pero ya se nota que heredó mi carácter fuerte. Tiene genes gringos. Es parecido a mi hermana Silvina que es rubia con ojos claros”.