Liao Junbo, un ejemplo a seguir
La temprana desaparición del vicealcalde de Nanping continúa lamentándose
“Liao Junbo fue un verdadero miembro del Partido Comunista de China (PCCh). Todo lo que hizo, lo hizo por el bienestar del pueblo. Persiguió un sueño, que es de lo que se trata el ‘sueño chino’”. Este es uno de los comentarios elogiosos publicados en el sitio web conmemorativo de Liao Junbo.
Liao Junbo fue un verdadero miembro del Partido Comunista de China (PCCh). Todo lo que hizo, lo hizo por el bienestar del pueblo. Persiguió un sueño, que es de lo que se trata el ‘sueño chino’”. Este es uno de los comentarios elogiosos publicados en el sitio web conmemorativo de Liao Junbo.
Liao fue vicealcalde de la ciudad de Nanping, provincia de Fujian, y miembro del Comité Permanente del Comité Municipal del PCCh. Falleció en un accidente de tránsito en marzo pasado, en pleno cumplimiento de sus funciones. Tras su muerte, en un lapso de pocos días, más de 400.000 personas expresaron en WeChat conmoción y tristeza por la desafortunada noticia. Las condolencias, incluso, continúan transmitiéndose hasta hoy en el sitio web conmemorativo.
El presidente de China, Xi Jinping, pidió a todos los miembros y funcionarios del PCCh que aprendieran de Liao Junbo. Sin embargo, ¿cuál es el motivo por el cual millones de chinos quieren y admiran a Liao Junbo?
El “capataz”
Liao Zhiqi, la hija de Liao Junbo y quien pronto comenzará un postgrado, recuerda que alguna vez un compañero de clase le preguntó cuál era el trabajo de su padre. “Mi papá es un capataz”, respondió, porque así es como su padre describía su trabajo.
En 1995, Liao, quien entonces tenía 27 años de edad y ejercía como maestro de física en una escuela secundaria de un poblado, fue enviado a trabajar a la Oficina del Comité Municipal del PCCh de Shaowu, en la provincia de Fujian. Tres años después fue nombrado alcalde del poblado de Nakou, en la ciudad de Shaowu, y luego fue asignado a diferentes puestos de distintos niveles en gobiernos locales y en el Parque Industrial Ronghuashan.
En el momento de su muerte trabajaba como vicealcalde de la cuidad de Nanping y director del Comité Administrativo del nuevo distrito de Wuyi. Bajo estos cargos, la labor de Liao siempre estuvo muy relacionada con la construcción de infraestructura. El “capataz” fue testigo del desarrollo de cuatro parques industriales, de la mitad de una nueva ciudad, y de un gran número de puentes y carreteras.
En 1998, el poblado de Nakou fue devastado por la peor inundación de los últimos 100 años y fue precisamente Liao quien se tuvo que enfrentar a la difícil tarea de la reconstrucción. En lugar de dar órdenes desde su oficina, Liao pasó días y noches en el terreno donde había ocurrido la calamidad, visitando una por una a las cientos de familias afectadas, y dirigiendo a la población local en las labores de reparación de hogares y reconstrucción del poblado. Para el Año Nuevo chino de 1999, las 500 familias que habían perdido sus hogares a causa del diluvio ya se encontraban reubicadas en nuevas viviendas.
En octubre de 2007, Liao fue nombrado director del Comité Administrativo del Parque Industrial Ronghuashan. Aunque solo contaban con un capital inicial de 20 millones de yuanes, Liao y sus colegas lograron recaudar más fondos y conseguir inversionistas para varios proyectos. Sus esfuerzos fueron finalmente recompensados cuando se construyó un parque industrial con un
valor de producción de miles de millones de yuanes.
Desde junio de 2011 hasta noviembre de 2015, Liao actuó como secretario del Comité Distrital del PCCh de Zhenghe. Antes de su llegada, Zhenghe era la región más atrasada de la provincia de Fujian. De hecho, ser asignado a Zhenghe era la peor pesadilla de cualquier funcionario.
Pero Liao tenía una visión diferente. Durante los primeros dos meses, él y sus colegas entraron en las aldeas subordinadas, comunidades residenciales, fábricas y minas para familiarizarse con las condiciones locales. Mientras llevaba a cabo las visitas, comenzó a trazar en su mente un plan de desarrollo para Zhenghe: con base en la agricultura moderna, generar industrias, turismo y desarrollo urbano.
En aquel entonces, el distrito de Zhenghe no contaba con una sola autopista, carretera o puente decente. Ni siquiera disponía de semáforos o pasos de cebra para los peatones. Sin embargo, durante los cinco años que Liao dirigió Zhenghe, no solo se vio un incremento en la tasa de urbanización –del 31% al 46%–, sino que también fueron puestos en funcionamiento un bulevar, una plaza, un centro cultural, nueve puentes y dos autopistas. Liao también dedicó muchos esfuerzos al desarrollo del Parque Industrial Tongxin, cuyas industrias se centran en bambú, madera, alimentos y maquinaria. Actualmente, en el parque operan 37 empresas y otras 57 están en proceso de comenzar sus operaciones. En 2016, el valor total de producción industrial alcanzó los 1500 millones de yuanes, con una plantilla de 3000 empleados.
Para 2012, Zhenghe escaló 35 puestos en el índice de desarrollo económico entre los distritos de Fujian, logrando el mayor avance en la provincia. De 2013 a 2015, Zhenghe fue uno de los 10 distritos con mejor desarrollo económico de Fujian, y de 2011 a 2016 los ingresos financieros del distrito aumentaron de 160 millones a 450 millones de yuanes.
Personas capaces en posiciones de liderazgo
Wei Changjin, vicepresidente del Comité de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh) de Zhenghe, recuerda que después de asumir el cargo, Liao estableció dos “líneas rojas” para los funcionarios de Zhenghe: la falta de diligencia y la falta de solidaridad.
En ese entonces, Zhenghe todavía estaba en la sombra por el caso de corrupción de un ex secretario del Comité Distrital del PCCh y todos los funcionarios locales se encontraban en mal estado de ánimo. Liao se percató de la necesidad de reformar el mecanismo de selección y promoción de los funcionarios, en aras de que los más capaces y activos pasaran a primer plano. Bajo su liderazgo, el distrito estableció 11 equipos de trabajo para el desarrollo de diferentes proyectos, entre ellos economía urbana, industria y plantaciones de té. Luego, para los puestos administrativos de estos
proyectos, se asignaron funcionarios del Comité Distrital del PCCh, de la Asamblea Popular, del Gobierno y de la CCPPCh.
Liao, además, introdujo un sistema de recompensa para evaluar los logros anuales de los funcionarios locales. Los de mejor desempeño recibieron premios en efectivo y ascensos, y los que realizaron su trabajo de manera insatisfactoria fueron reajustados a otros puestos.
Liao valoraba mucho a los cuadros con experiencia y eficiencia en el cumplimiento de sus funciones. De los 128 funcionarios nombrados y promovidos desde junio de 2011 hasta marzo de 2016, el 70 % había trabajado en grandes programas y ocupado puestos importantes o de base. Gracias a los esfuerzos de Liao, los funcionarios locales tuvieron más motivación y dedicación a la hora de trabajar.
Para Liao, nombrar una persona adecuada para determinado cargo era un asunto de suma importancia. Cuando Xu Shaowei ejercía como vicepresidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular de Zhenghe, fue invitado por Liao a hacerse cargo del desarrollo de infraestructura distrital. Sin embargo, argumentando que ya estaba muy viejo para el puesto, que su pelo ya pintaba varias canas, Xu rechazó la oferta. Al día siguiente, Liao lo volvió a visitar, esta vez llevando consigo una botella de tinte para el cabello. Bajo estas circunstancias, Xu fue incapaz de decirle “no” a Liao.
“El hombre más pequeño”
Lin Li, esposa de Liao, es maestra de secundaria en Nanping. Nunca llamó a su marido antes de las 11:30 de la noche, porque sabía que lo más probable era que siguiera trabajando. “A las 11:30 de la noche solía dejarle un mensaje en WeChat”, recuerda Lin Li. “Si había terminado su trabajo me llamaba; de lo contrario, me dejaba un simple mensaje diciendo ‘ocupado’”.
En alguna ocasión, Liao le dijo a su esposa que cuando se retirara pasaría todo el tiempo con su familia y se encargaría de todos los deberes domésticos. También se comprometió a viajar con ella y su hija al exterior. Liao, sin embargo, no pudo cumplir su promesa.
El 18 de marzo pasado, Liao tuvo una cena apresurada en casa después de una reunión en el ayuntamiento, debido a que luego tenía que asistir a otra reunión en el nuevo distrito de Wuyi. Durante días no había regresado del trabajo sino hasta las primeras horas de la madrugada. Como estaba lloviendo mucho, Lin Li trató de persuadirlo para que aplazase la reunión, pero Liao le dijo que era imposible reajustar el cronograma. Una hora más tarde, Lin recibió una llamada informándole sobre el accidente de su marido. “¿Por qué no insistí más en que te quedaras en casa?”, se lamentó entre lágrimas frente a los restos de su esposo. “Si hubiera persistido en mi capricho quizá aún estarías vivo”.
Después de que se informara sobre la muerte de Liao, en tan solo cinco horas 100.000 personas expresaron sus condolencias y manifestaron su tristeza a través de Internet. El 24 de marzo acudieron a la funeraria de Nanping alrededor de 1000 personas, entre colegas, amigos, empresarios y especialmente ciudadanos locales, para presentar sus últimos respetos al “capataz”.
Como secretario del Comité Distrital del PCCh de Zhenghe, Liao tenía un sueño que lo hacía sentir maravilloso y que estuvo a punto de realizar: ayudar a los 230.000 habitantes de Zhenghe a tener una vida feliz. En los primeros tres años después de asumir el cargo, 30.000 personas del distrito habían sido libradas de la pobreza.
En junio de 2015, Liao fue elegido como sobresaliente secretario del Comité Distrital del PCCh a nivel de todo el país, y fue recibido por Xi Jinping, secretario general del Comité Central del PCCh. El 6 de junio pasado, el Comité Central del PCCh le concedió el título póstumo de “Miembro ejemplar del PCCh”. El 20 de junio, el Departamento de Propaganda del Comité Central del PCCh le confirió el honor de “Modelo de nuestros tiempos” y exhortó a todos los miembros del Partido a seguir su ejemplo.
“Todos los miembros del Partido y funcionarios públicos deben aprender de Liao Junbo, tener presentes sus aspiraciones fundacionales, trabajar de forma pragmática, ser honestos en el cumplimiento de los deberes oficiales, esforzarse por llevar a cabo las políticas y directrices del Partido, y contribuir de todo corazón a la mejora del bienestar del pueblo”, comentó el presidente Xi.
Lin Li recordó una escena de cuando Liao era alcalde del poblado de Nakou y su hija le preguntó: “Papá, ¿eres el hombre más grande del poblado?”. Aquella vez Liao le respondió: “No, papá es el hombre más pequeño del poblado, dado que sirve a todos aquí”. A pesar de haber tenido una carrera política de más de 20 años, Liao fue un humilde servidor público hasta el fin de sus días. Al igual que él, en China hay muchos más funcionarios que contribuyen a hacer realidad el “sueño chino”.