Calidad superior y eficiencia
Scania lanzó en Latinoamérica su nueva generación de camiones con el foco en la sustentabilidad (del planeta y de su propio negocio). Pero, además, las cabinas tienen el estilo y el confort de pequeños departamentos de lujo.
Todo el mundo sabe de la necesidad y urgencia de bajar los índices de contaminación para que la Tierra siga siendo un sitio habitable por muchos años más. Pero algunos también vislumbran que hay negocios que deben reinventarse para continuar siendo tales. En estas dos cuestiones puso el foco Scania para desarrollar su nueva generación de camiones, proceso que duró 10 años y demandó una inversión de 2 mil millones de euros.
Scania piensa que el negocio de vender camiones debe transformarse en el de brindar un servicio integral de transporte. Con el fin de mantener el camión operativo la mayor parte del tiempo posible y, además, ahorrar en combustible y desgaste de piezas, con la nueva generación de camiones Scania les brindará a los clientes un servicio de entrenamiento para los conductores (y hasta coaching on line cuando el conductor esté trabajando) para que puedan aprovechar al máximo toda la tecnología que tiene el camión y usarla en favor de la reducción de costos. En este sentido, todos los nuevos camiones Scania están conectados a una central operativa de Scania (en Suecia), desde donde se monitorea el camión para ver cómo se lo está usando y, en base a ello, saber qué piezas se están desgastando más y cuáles menos. Entonces, los services de mantenimiento se programan en forma personalizada, ya no más un service cada tantos kilómetros, porque algunos clientes lo necesitarán antes y otros después, según cómo usan el camión y por dónde. No se desgasta del mismo modo un camión que viaja siempre por la Llanura Pampeana que otro que lo hace por la cordillera de Los Andes. Y hasta se puede saber qué tipo de service debe realizársele al camión, qué piezas habrá que cambiar, para tener todo preparado en el taller y así el camión entra y sale a las pocas horas con todo resuelto. Esto es una muestra de que para el transporte del futuro, la productividad y disponibilidad de las unidades estarán cada vez más ligadas al uso inteligente de los datos generados por los vehículos. El perfeccionamiento de la conectividad es prioridad para Scania, y se basa en el análisis continuo de la información generada por los vehículos conectados globalmente. Hasta el momento, esta base de datos tiene unos 350 mil vehículos monitoreados, entre camiones y buses, y todos los Scania, en unos años, estarán conectados vía internet.
Pero la sustentabilidad del planeta también está en juego, y para eso Scania trabaja en varios frentes. Por un lado, el entrenamiento y coucheo
on line a los conductores se orienta al ahorro en consumo de combustible y de emisiones del camión. Pero ade-
más, la misma fabricación de los camiones está fuertemente vinculada a la ecología: 1) Reaprovechamiento de 4.800 litros de agua al día y utilización de agua de lluvia para el lavado de camiones, sanitarios y máquinas. 2) Desde el 2016, en la planta de Scania en Brasil, se utiliza energía de origen no fósil (hidroeléctricas, biomasa o solar). Y algo más, los motores que se ponen a prueba (como en todas las fábricas) funcionan a la vez como generadores de energía para la iluminación y equipos de computación de la planta. 3) Todo el residuo orgánico generado en Scania pasa por un proceso de “composte” (fertilizante para las plantas). 4) Las fábricas aprovechan la iluminación natural, con estructuras de materiales que ofrecen un clima agradable, evitando el uso de aire acondicionado.
Y, por último, motores cada vez más eficiente orientados a disminuir consumo y emisiones. Todos los motores fueron recalibrados y la reducción de consumo puede llegar hasta un 12 %, lo que en términos de dinero, en una gran flota con camiones que circulan todos los días, es una verdadera fortuna.
También es fundamental para una empresa que brinda un servicio de transporte asesorar al cliente para que elija el camión indicado para su utilidad, porque es vital tener la potencia justa para obtener el mejor desempeño con el menor consumo po- sible. La nueva generación de Scania ofrece cuatro motores, con varias opciones de potencia: un nuevo 7 litros (con potencias de 220, 250 y 280 CV), el 9 litros (280, 320 y 360 CV), el 13 litros (410, 450, 500 y 540 CV) y el imponente V8 de 16 litros con 620 CV de potencia y 3.000 Nm de torque. También se ha mejorado la velocidad de cambios instalando un freno en el eje secundario de la caja automática y reduciendo el tiempo de cambio de marchas a la mitad, aumentando también la respuesta del motor. Todos los Scania, además, cuentan con un dispositivo de “Predicción activa”, que utiliza información topográfica y del GPS para calcular el perfil de velocidad más eficiente en términos de consumo de combustible a lo largo de la ruta.
Hasta acá, una muestra de que la compra de un camión es primordialmente racional, porque es la pieza fundamental del negocio del transporte de cargas. Sin embargo, también hay un componente emocional, y lo aporta el diseño, la calidad de materiales y el equipamiento de las cabinas de esta nueva generación Scania. La nueva cabina S, tope de gama, con el piso totalmente plano, es tan lujosa como los autos más lujosos que existen, y más. Parece una habitación, con muebles, heladera, microondas, televisor y una cama realmente muy cómoda. En un Scania de estos, dan ganas de ser camionero.w