Cómo proteger y conservar la madera en espacios abiertos
Existen productos para contrarrestar los efectos adversos del clima.
La madera en los espacios exteriores suma funcionalidad y diseño. Por eso es el recurso utilizado a la hora de diseñar muebles de jardín. Además, posee las propiedades de un material noble y duradero que brinda armonía y transforma un rincón del jardín o el parque en un espacio de disfrute y relax.
Así que decks, mesas, sillas, glorietas, reposeras de madera, entre otras, son protagonistas de diversos sitios, otorgando un toque de distinción a los espacios abiertos.
Para los muebles exteriores, desde la Cámara de la Madera (Cadamda) recomiendan elegir eucaliptus grandis tratado y pino impregnado, que son las que tienen mayor resistencia a las condiciones climáticas extremas.
Otra opción es la madera de Incienso, ya que su calidad soporta muy bien los agentes climáticos debido a la firmeza de los encastres (no se aflojan).
Sin embargo, para lograr preservar la madera en perfectas condiciones es clave cuidarla con barnices y ceras.
La limpieza de los muebles de jardín hechos en madera se debe realizar siempre con jabón neutro, ya que permite eliminar fácilmente la suciedad acumulada. Luego hay que aplicar aceite de teca.
Para muebles que no están muy sucios, los profesionales de Cadamda recomiendan utilizar un detergente suave, porque quita la suciedad y las manchas pero conserva la capa de aceite en el mueble de madera.
Una vez limpios, en todos los casos, hay que colocar un aceite protector, que se aplica con un pincel o un paño en una capa uniforme y recubridora. Luego hay que esperar entre 15 y 20 minutos y quitar el sobrante con un paño. Recién después de 24 horas se puede utilizar el mueble. Un dato para tener en cuenta es que en este período el mueble no se debe mojar.
En el caso de los decks, es fundamental que estén colocados a no menos de 15 cm levantados del piso natural o contrapiso y que se encuentre apoyado sobre listones que permitan que la madera, al estar separada del suelo, quede aireada. También hay que controlar que las pendientes de desagüe sean respetadas.
Para proteger los decks de los agentes climáticos hay que utilizar productos que deben soportar la abrasión. Esto implica que aquello que se usa para el mantenimiento de una puerta, una pérgola o un alero no se puede usar en un deck. Sin embargo, lo que se usa en un deck sí puede aplicarse en todo el resto del equipamiento, y de hecho esto se recomienda para obtener terminaciones decorativas homogéneas.
En cuanto a colores, en general las terminaciones son muy variadas de acuerdo a los productos que hay en el mercado. Si bien es factible lograr cualquier color, dada la alta exposición al sol, se recomiendan productos con alta pigmentación y de tonos oscuros, porque estos pigmentos otorgan mayor protección. El mercado posee hoy gran variedad de maderas y productos para diseñar y construir fácilmente decks y obtener terminaciones decorativas y estéticas. ■