Gigliotti festejó dos goles que también se disfrutaron en Boca
Desde que volvió a la Argentina soñó con una noche así. Y en Rosario apareció el goleador que alguna vez supo vestirse de azul y amarillo (donde ayer también gestejaron sus goles) pero que hoy grita goles con una camiseta roja. Emmanuel Gigliotti, pese a que ya había marcado un tanto (ante Vélez), se debía una jornada como la que vivió anoche, cargada de emoción y con algo de polémica.
Es que el partido del Puma tuvo de todo. En sintonía con lo que fue el encuentro de Independiente, en el primer tiempo le costó desmarcarse de Domínguez y Moiraghi y sólo tuvo una chance de gol cuando no logró desviar un disparo cruzado de Barco. Tanto se “aburrió” en el área que buscó asociarse en el juego ofensivo retrasándose varios metros.
Pero en la segunda etapa, cuando los mediocampistas que tiene a sus espaldas (Rigoni se encendió y mejoró a todos) crecieron, se vio su faceta goleadora. Primero metió un cabezazo puntual para el 3 a 1 y puso el cuerto gol del equipo con una buena definición en el mano a mano ante Pocnrjic. Antes estuvo en medio de dos polémicas. A los 9, le anularon un gol por una posición adelantada muy finita. Y a los 23 minutos, le pegó una patada en la cara a Formica en la puerta del área. No fue con intención, pero levantó tanto la pierna hacia el rostro del 10 de Newell´s que el árbitro debió considerarlo una jugada imprudente, algo que también le había ocurrido frente a Estudiantes hace una semana. Al minuto de ver esa amarilla que debió teñirse de roja, empezó su noche soñada.
El gran triunfo del equipo mereció los elogios de Ariel Holan. “El equipo respondió muy bien. Me voy orgulloso y satisfecho por lo que hicieron. Estaba seguro de que nos haríamos un equipo competitivo y lo logramos. Newell´s es un gran rival, que si ganaba se ponía a un punto de Boca. Pensar en el clásico con Racing antes de tiempo hubiese sido un error. Ahora será un encuentro aparte , distinto a todos y tenemos que estar preparados de la mejor manera”, marcó el DT, que sigue invicto.