Clarín - Deportivo

Vuelta olímpica de local, en la última fecha y con Unión: igual que Bianchi en 1998

Diecinueve años atrás, Boca cerraba invicto el primer torneo bajo la conducción del Virrey. Aquella vez ganó 3-1.

- Javier Quintela jquintela@clarin.com

El mismo festejo, la misma pasión, el mismo escenario y el mismo rival. La historia siempre se repite. Hace 19 años, Carlos Bianchi celebraba su primer título como entrenador de Boca. Fue por el Torneo Apertura 98, que coronó al Xeneize de manera invicta. En la última fecha, aquel equipo del Virrey -que dos jornadas antes se había asegurado el campeonato- enfrentó a Unión, en la Bombonera, en un encuentro que terminó con victoria para el equipo local por 3-1 8dos del Titán Palermo y uno del Vasco Arruabarre­na). Fue, al cabo, la excusa para dar una vez más la vuelta olímpica, la primera de muchas otras que luego vendrían.

Hoy, desde las 16.15, la pelota le hará un guiño a la historia: nuevamente ante Unión, este Boca versión Guillermo Barros Schelotto tendrá su merecido festejo en la Bombonera, luego de consagrars­e campeón del torneo local la fecha pasada en la previa del choque ante Olimpo, en Bahía Blanca. Los giros de la vida colocan al Mellizo en ambas celebracio­nes: en 1998, el ahora DT era un picante wing que no se cansaba de abastecer a un Martín Palermo sediento de goles. Eso sí, ante Unión, en esa fecha final, Barros Schelotto debió ver el partido desde la tribuna porque estaba lesionado (en su lugar jugó el por entonces juvenil Adrián Guillermo). El otro Barros Schelotto, Gustavo, se dio el gusto de disputar los últimos 22 minutos, en lugar de José Basualdo.

De aquel recordado equipo de Bianchi, el Mellizo es el segundo futbolista de ese plantel que logra un título como entrenador de Boca. ¿El primero? Rodolfo Arruabarre­na, el lateral izquierdo de ese conjunto, que en 2015 festejó por duplicado en el tor- neo local y en la Copa Argentina. Además del Vasco y del Mellizo, los otros integrante­s del campeón 98 que se inclinaron por la dirección técnica fueron el propio Palermo, Jorge Bermúdez y Diego Cagna, mientras que Roberto Abbondanzi­eri se mantiene ligado a la conducción siendo ayudante de campo del Titán (actualment­e en Unión Española, de Chile).

En cuanto al equipo para esta tarde, Guillermo repetirá la formación que empató hace cuatro días ante Olimpo, pese a que Leonardo Jara y Fernando Tobio arrastran molestias físicas. Habrá una situación particular en medio del festejo: este podría ser el último partido de Ricardo Centurión con la camiseta de Boca, ya que al delantero se le vence el préstamo y deberá regresar a San Pablo, a menos que los dirigentes decidan comprar su pase (la opción es de poco más de seis millones de dólares).

Del otro lado, en el presente de Unión -que busca entrenador- abundan las dudas. Si bien no está comprometi­do con el descenso, los santafesin­os llegan al choque de hoy con una victoria en los últimos 11 partidos, con el agregado de haber marcado sólo cuatro goles en ese lapso.

De Bianchi a Guillermo. Con un guiño al pasado, Boca celebrará una nueva vuelta olímpica.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina