Banfield y Racing juegan casi una final
Si gana, El Taladro asegurará su cuarta participación. Los de Cocca deben vencer y esperar resultados.
Aunque no haya un campeonato en juego, en el anochecer del domingo habrá uno de esos duelos con formato de final. Banfield y Racing se disputan un lugar en la Copa Libertadores, nada menos. Entonces, el partido toma relieve en la última fecha. Como aquel que los enfrentó en 1951, en el Viejo Gasómetro de Avenida La Plata, el que coronó tricampeón a la
Academia gracias al golazo del Atómico Mario Boyé. O el que los dejó cara a cara hace 12 años, en el estadio Florencio Sola, cuando el Taladro venció su rival celeste y blanco con un grito de Javier Sanguinetti y lo dejó
sin chances de pelear el campeonato ni de clasificar a la Sudamericana.
Banfield tiene dos puntos de ventaja. Y una demoledora estadística como local: de 14 encuentros, ganó 11, empató 2 y apenas perdió uno. Su porcentaje de eficacia en casa llegó al 83,3%. Su último traspié en Peña y Arenales se registró el 11 de marzo. Ese día, Boca lo derrotó 2 a 0.
La campaña del equipo, a cargo de Julio César Falcioni, es espectacular.
Y hasta el martes, cuando San Lorenzo le ganó con el gol de Fernando Belluschi, peleó el título. Le falta, claro, el pasaje al máximo torneo continental. Depende de sí mismo. Los tres puntos le asegurarán su cuarta participación (2005, 2007 y 2010).
Racing llega a este mano a mano con Banfield a bordo de dos victorias
(ante River en el Monumental y contra Colón en el Cilindro), pero con algunas bajas y desniveles. Gustavo Bou ya está en México, donde jugará en el Tijuana, y Lisandro López se lesionó. Como Juan Musso está recuperándose de un desgarro, seguirá atajando el joven Gastón Gómez. El esquema 5-3-2 -con Pablo Cuadra en reemplazo de Matías Zaracho- parece ser una constante en este último tramo del torneo. ¿Será el último partido de Marcos Acuña? Se verá.
Racing necesita ganar y esperar que San Lorenzo, Estudiantes y Lanús no lo hagan el martes.