Canapino se quedó con todo en General Roca y le puso mucho picante al campeonato
El piloto de Arrecifes se ubicó a sólo un punto del líder Altuna. Será casi mano a mano en las tres fechas finales.
Agustín Canapino se quedó con todo. Puso parte del botín en un bolso, otro en los bolsillos de la campera y hasta tuvo margen para guardarse más en los del pantalón. Porque había hecho el mejor tiempo en la clasificación; también se había llevado la primera competencia del domingo y, como su hambre de gloria parecía insatisfecho, se quedó entonces con la última y definitiva carrera, con una estrategia arriesgada que le dio grandes dividendos a su Mercedes Benz. Ahora, después de vencer en el regreso de la categoría a la ciudad luego de nueve años, va con todo por el campeonato del Top Race V6.
Luego de que Canapino ganara los 23 giros de la primera competencia con total dominio, la segunda final en suelo rionegrino final tenía a Lucas Guerra, Juan Manuel Silva y Ricardo Risatti en los primeros tres lugares. A Matías Rodríguez, quien debía ser el líder en la salida, se le rompió la caja de cambios y ni siquiera pudo arrancar la prueba.
Pero Guerra fue tocado por Josito Di Palma (al cabo, excluido por esa acción) y el Pato le quitó el liderazgo de la carrera. Pero no pudo disfrutarla demasiado: Franco Girolami comenzaba a acercarse amenazante a los primeros puestos y no se quedaría en promesas, ya que superaría a Guerra, a Risatti y al chaqueño para quedar como puntero.
El destino de la carrera comenzaría a cambiar luego de la primera mitad, cuando los vehículos empezaron a meterse a boxes para abastecerse de combustible. Girolami tuvo problemas en un cambio al ingresar a los pits y Canapino, que había empezado a trepar lugares con las paradas del resto, alcanzó la punta. Ahí estuvo la gran clave del equipo Sportteam: la elección de una estrategia sin paradas en boxes. Aunque por entonces, claro, la pregunta era si resistiría hasta el final de la carrera. Por caso, al propio Girolami eso le había jugado una mala pasada en la primera carrera, ya que había tenido que abandonar por quedarse sin nafta.
Con giros lentos pero manejando los tiempos de la carrera, el Rey de la categoría (es el que más títulos ganó, el que más carreras se adjudicó y el que más veces hizo la pole position) recibió la indicación del equipo para no sobreexigir el Mercedes cuando quedaban diez vueltas. “Si salís segundo, no hay problema; lo importante es terminar adelante de (Mariano) Altuna”, le dijeron en referencia al líder del campeonato. Y no hubo mayores complicaciones: a Girolami no le dio el tiempo para alcanzarlo.
El negocio para Canapino fue redondo porque lo ayudó su debutante compañero de equipo, Guillermo Ortelli, quien terminó cuarto (había arrancado 18°) y evitó que Altuna avanzara más posiciones. En la misma sintonía del equipo, el de Salto tampoco paró en boxes. Con dos últimas actuaciones pobres de parte de Gabriel Ponce de León (120 puntos), el campeonato se resume a dos nombres: Altuna y Canapino. El de Arrecifes parece tener resto para dar el asalto final en las tres últimas fechas.