Novatos que tienen números y protagonismo de veteranos
Mitchell, Tatum, Ball y Simmons se destacan en su estreno como jugadores NBA. ¿Quién será el Rookie del Año?
Más allá de Ben Simmons o Lonzo Ball, hay dos candidatos a Rookie (Novato) del Año que, en silencio o no tanto, tienen chances más que justificadas de alzarse con este premio de la NBA que reconoce a los jugadores en su primera temporada como profesionales: Donovan Mitchell (Utah) y Jayson Tatum (Boston).
El perimetral del Jazz (21 años) estuvo a punto de no presentarse al draft luego de un cierre de temporada lejos del éxito esperado con la Universidad de Louisville, fue convencido - entre otros- por Chris Paul y Paul George en un campus para jóvenes. Ambos le aseguraron que su talento no tenía más que esperar. Ahora, el rookie igualó un récord del histórico Karl Malone al llegar a su 18° partido como novato anotando al menos 20 puntos. Promedia 18,8 tantos, 3,4 asistencias y rebotes y 1,5 robos.
En diciembre le metió 41 puntos a los Pelicans, cifra que jamás había alcanzado un jugador de primer año en Utah. Se unió, ese día, a un selecto grupo de jugadores aún activos que anotaron al menos 40 puntos en su campaña debut: LeBron James, Carmelo Anthony, Kevin Durant, Blake Griffin, Stephen Curry y Eric Gordon. Salvo este último (quien igualmente es una pieza importante de los Rockets), los demás se convirtieron en verdaderas estrellas de la liga.
Tatum es el menos marketinero de todos estos nombres (entre los que también se puede incluir a Kyle Kuzma, de Los Angeles Lakers) pero da la sensación de que es el jugador “más hecho” de esta camada. Más allá de los números, dentro de la cancha responde muchas veces como si fuera un hombre de años en la liga, algo rarísimo de ver en un chico de 19 años.
Jayson, quien cumplirá 20 en marzo, se acopló al juego de Boston, que pese a la pérdida de Gordon Hayward se instaló como el mejor del Este. Él tuvo mucho que ver. Se convirtió en rueda de auxilio clave en el engranaje de Brad Stevens, no le pesan las situaciones calientes y muestra inteligencia a la hora de jugar sin pelota.
No todo va por lo técnico: también traslada su talento a los números. Tatum muestra esa madurez en sus lanzamientos, ítem habitualmente flojo de los rookies, que ajustan su tiro conforme ganan experiencia. Porcentajes: 49,9% en tiros de cancha, 45,9% en triples y 82,2% en libres. Son mejores que los de los últimos tres Rookies del Año y que otros ganadores contemporáneos del premio como Lillard, Kyrie Irving o Tyreke Evans.
Lo que más asombra, sin embargo, es su nivel de incidencia en los éxitos del equipo. Entre sus muchas estadísticas, en la NBA se lleva un registro llamado “Win Shares”, que calcula la cantidad de triunfos que un jugador le aporta al equipo desde su actuación. En la tabla de este ítem, James Harden es el líder, con un valor de 8, seguido por LeBron (7,8). Tatum es el 16°. Con 5,1 iguala a Kevin Durant y supera a Kevin Love, Kyle Lowry, Chris Paul y muchos otros cracks.