Golazo de Agüero para que Guardiola celebre su primer título con el City
Abrió la cuenta, a pura picardía. Suma 30 goles en 35 partidos de la temporada y tiene 199 con la camiseta celeste.
El escenario de la final de la Copa de la Liga de Inglaterra es nada más y nada menos que Wembley. Pero allí, en la cuna del fútbol mundial, Sergio Agüero reivindica el potrero. Sólo así se en- tiende el primer gol del Manchester City, el que abrió el camino a la consagración y le dio a Pep Guardiola su primer título con los Citizens: el saque desde el arco de Claudio Bravo - largo, saltando líneas, sorpresivobusca al Kun, que, vivo, le gana la posición al alemán Shkodran Mustafi y transforma un simple pelotazo en una jugada de peligro. “Lo corro un poquito con el cuerpo, pero para mí
no fue falta”, diría el argentino luego. El resto de la jugada es para enmarcar: mano a mano, el argentino definió por encima del cuerpo del colombiano David Ospina, cuyo salto sólo sirvió para embellecer el gol.
A tres meses del inicio del Mundial, Agüero sigue consolidando su lugar no sólo en la lista de 23 jugadores de Jorge Sampaoli, sino entre los once titulares. Su presente es elocuente: suma 30 goles en esta temporada (en 35 partidos), y además quedó a apenas un tanto de los 200 gritos con la camiseta del City. Y más: este fue su séptimo título como Citizen, club al que llegó en agosto de 2011. “Estoy muy contento por este trofeo. Es muy importante para todos nosotros. Queremos seguir por este camino”, sostuvo el ex Independiente, consciente de lo que le depara el resto de la temporada: la Premier League -en la cual es líder y le lleva 13 puntos de distancia a su escolta, el Manchester United, con un partido menos- y la Champions League -tiene un pie en los cuartos de final, tras vencer en la ida de los octavos a Basilea como visitante, por 4-0-.
Pero claro: si el Kun brilla es también porque hay un equipo detrás. Un gran equipo, más bien, que en ningún momento le dio la chance al Arsenal a reaccionar (Nicolás Otamendi también fue titular). Los otros dos goles -convertidos por Vincent Kompany y David Silva- tradujeron en el marcador esa supremacía. Y
hasta uno de ellos sirvió para emocionar a más de uno: Silva le dedicó su tanto a su pequeño hijo Mateo, que nació en enero de forma prematura, en el sexto mes de gestación.
Más allá del buen rendimiento del
equipo, Guardiola fue autocrítico. “El primer tiempo no fue tan bueno, cometimos errores en pases simples. Pero en el segundo jugamos con más coraje. Era muy importante ganar el título tras la eliminación en la Copa FA”, sostuvo el catalán, que levantó su primer título como DT Citizen
(asumió en febrero de 2016). “Esta victoria no es para mí, es para el
City”, añadió. Ahora bien: Pep no pasó desapercibido en la tarde inglesa. ¿Qué le sucedió? Tal como hizo en partidos anteriores, el DT salió a dirigir la final con un pequeño lazo amarillo en su pecho, en honor a los presos políticos catalanes, aunque la Federación inglesa ya le había abierto un expediente ya que no le permiten “llevar mensajes políticos” en su vestimenta y podría ser sancionado. Y, además, discutió con Arsene Wegner, ya que el DT del Arsenal pidió falta de Agüero en el primer gol. Poco le importó: de la mano del Kun, Pep consiguió su primer trofeo en Inglaterra.