Mayer aprovechó las buenas noticias y se abre camino en Indian Wells
Nishikori no jugó por gripe y su rival fue el débil Bemelmans. Ahora se viene Daniel, vencedor de Djokovic.
Una jornada cargada de buenas noticias tuvo Leonardo Mayer en el Masters 1000 de Indian Wells (7.972.535 dólares; cemento). Mientras esperaba su turno para salir a la cancha se enteró del retiro de Kei Nishikori, a quien debía enfrentar por la segunda ronda. En lugar del japonés ingresó como “perdedor afortunado” el belga Ruben Bemelmans, 113° del ranking, que poco pudo hacer ante el correntino (47°). Con un sólido 6-4 y 6-1, el Yacaré avanzó a la tercera rueda, en la que tendrá un rival más accesible del esperado. Porque Taro Daniel sorprendió a Novak Djokovic y lo espera para definir el pase a octavos de final.
Faltaban todavía unas horas para el partido entre Mayer y Nishikori cuando la organización del torneo informó que el ex número cuatro del mundo había decidido retirarse por una gripe. “Estuve enfermo toda la semana, hice todo para sentirme mejor, pero todavía no estoy lo suficientemente fuerte para jugar”, escribió en su cuenta de Twitter el asiático. Así se le abría el camino hacia la tercera ronda al argentino, que salió a la cancha motivado y jugó un partidazo ante su nuevo rival.
Muy efectivo con su servicio -ganó 83 por ciento de los puntos que jugó con el primero, metió ocho aces y no cedió chances de quiebre- y con más ritmo que el belga, que había perdique do en la segunda ronda de la clasificación, el correntino tomó las riendas desde el principio y selló el triunfo sin problemas tras apenas una hora de juego.
Así se metió en la tercera ronda de un Masters 1000 por primera vez en dos años. No alcanzaba esa instancia desde la edición 2016 de este mismo torneo, cuando se despidió en su tercera presentación ante el croata Marin Cilic.
Su mejor actuación en lo que va de la temporada habían sido los cuartos de final en los ATP 250 de Buenos Aires, donde cayó frente ante el francés Gael Monfils, y de San Pablo, en el que perdió con el uruguayo Pablo Cuevas.
El correntino quedó ante una buena chance de dar un paso más en el primer Masters 1000 de la temporada. Porque Taro Daniel dio la sorpresa ante un Djokovic fuera de forma, se impuso por 7-6 (7-3), 4-6 y 6-1 y será su próximo rival.
“Me sentí raro en la cancha, como si fuera mi primer partido en el circuito. Nunca pude encontrar el ritmo con mi revés. Agradezco que pude volver rápido a la cancha después de la operación en el codo, pero no me sentí nada bien”, reconoció el serbio, no jugaba un partido desde el Abierto de Australia.
Quien no pudo dar el batacazo fue Federico Delbonis. El azuleño, 67° del ranking, se despidió al caer por 6-3 y 7-6 (8-6) ante Roger Federer, máximo favorito y campeón defensor, en un partido que se había suspendido el sábado a la noche por lluvia cuando igualaban 2-2 el segundo set.
Tras la reanudación, Delbonis pudo mantener el marcador parejo hasta el tie break, pero en el desempate erró muchas pelotas y el número uno del mundo, que quiere sumar su sexto título en el torneo, no lo perdonó.