Hubo póker de Icardi y Messi ratificó que es el as de espada
Inter goleó 5-0. Barsa ganó 2-0 con uno de Leo y sacó 11 puntos.
Habrá que encontrar razones para rebatir que el primer tiempo de Barcelona fue de lo mejor del equipo de Valverde este año. Por el rival, ya que Athletic Bilbao nunca es accesible aunque no rescata un punto del Camp Nou desde hace 14 años. Porque al equipo de gala le faltaron Luis Suárez y Sergi Busquets y Andrés Iniesta fue al banco y entró con el partido definido. Porque, a esta altura, el trajín se siente y se sufre,. Tal vez por eso el Barça levantó el pie del acelerado y “manejó” la ventaja lograda con los goles de Alcácer y de Messi. El primero, después de 29 pases. La diferencia al cabo de la primera apar- te pudo ser de marcador de basquet. Los palos evitaron goles de Paulinho y de Coutinho y el cotizado Kepa (en el radar del Madrid) paró varias pelotas que buscaban la red. Athletic cambió de actitud en el segundo tiempo, apretó más arriba y la pelota estuvo más dividida. Ter Stegen pasó algún sobresalto aislado, nunca un riesgo evidente.
Lo de siempre, ovación al equipo y una nota nueva. Messi celebró su gol con un bailecito que nunca se le había visto. Todos contentos al vestuario a esperar al Atlético, obligado a ganar en La Cerámica...
Pero el equipo de Simeone perdió con Villarreal. Aquel gol de Griezmann se diluyó en el final con un doblete de Enes Unal. El Cholo movió el banco y tuvo que volver a moverlo. Sacó a Griezmann y puso a Gabi. Resignó ataque y buscó cuidar la pelta en el medio. Y en el minuto siguiente le empató Villarreal. Entonces sacó a Koke y puso al Niño Torres. No resultó. Para colmo, en el descuento Villarreal hizo el segundo gol y dejó al Aleti a 11 puntos del Barça. La Liga parece sentenciada para los catalanes que además jugarán la final de la Copa del Rey con Sevilla y es favorito ante Roma en la serie de cuartos de la Champions League.
Sin chances reales en la Liga, Real Madrid busca regularidad en su juego en el torneo doméstico y no pasar sobresaltos en la clasificación a la Champions que ganó los últimos dos años. Tuvo enfrente al Girona, ascendido y grata sorpresa del año. Y fue un ida y vuelta en el Bernabeu tan colmado como estuvo el Camp Nou. Fue un festival de Cristiano que hizo un póker. Bale y Vázquez completaron la media docena.
CR7 llegó a 22 goles en la pelea por el Pichichi y superó por uno a Suárez. Pero manda Messi, con 25.