En una de las últimas, la lógica le hizo un guiño al que buscó
Dentro de la venerable ilógica del fútbol, hay destinos que se pueden prever. Y el de este Boca se descubrió en Tucumán cuando el partido se acababa; cuando las esperanzas se reducían; cuando alguna duda pretendía asomar sobre su candidatura al título. Y así, en una de las últimas jugadas, el Xeneize le arrebató la victoria a Atlético, en un Monumental colmado de fanáticos. Sí, cuando se bajaba el telón y el José Fierro era una fiesta, con fuegos artificiales incluidos, Walter Bou puso el 1-1 definitivo (Javier Toledo, de cabeza, había adelantado a los Decanos) y le dio un respiro a Guillermo Barros Schelotto.
Boca empezó mejor que su rival e hiló una serie de situaciones de gol desde temprano. La mala definición o las buenas atajadas de Augusto Batalla fueron obstáculos que se repetirían. Boca no acertaba en la última jugada. Tanta insistencia acabaría por tener su fruto. Atlético, en cambio, se equivocaba en forma permanente. No acertaba ni al principio ni al final. Pero, por esas cosas que tiene este deporte, fue el primero en gritar.
Cuando los tucumanos se acomodaron en la cancha golpearon con una pelota parada en la que la defensa de Boca se quedó estática. Toledo sacó provecho y con un cabezazo estableció el 1-0. La apertura del marcador llenó de dudas a Boca, que perdió la brújula. Si Atlético hubiese estado más fino en los contragolpes, la derrota habría sido inevitable.
En el complemento, Guillermo, con el marcador abajo y el recuerdo de la final perdida 96 horas antes con River, arriesgó en los cambios: puso a Bebelo Reynoso por Jara y el ex Talleres le dio otra dinámica al equipo. Incluso le hicieron un penal no cobrado y metió un zurdazo que tapó Batalla, una de las figuras.
Boca se hizo protagonista, arriesgó y se desprotegió atrás, como en aquella jugada que terminó en gol para Atlético pero que fue mal anulada por un offside que no era. Pero así, de tanto insistir, en uno de sus intentos postreros le sacó rédito a un error defensivo y Bou, otro de los cambios de Guillermo que trajo soluciones, empujó la pelota sobre la línea para el empate. Así, Boca sumó un punto y algo de tranquilidad.
En los momentos duros uno se amarga. Pero tenemos que seguir por el mismo camino y defender la camiseta de Boca. Contra Talleres es una final más por el título”. Nahitan Nandez Buscamos el partido, tuvimos situaciones y la metimos en el final. El empate también suma después de una semana dura. Nos vamos a recuperar en lo anímico”. Cristian Pavón