Adnan Januzaj y un golazo a las especulaciones
Bélgica e Inglaterra reservaron titulares y jugaron con liviandad porque ya estaban clasificados.
Inglaterra y Bélgica se encontraron en la última fecha del Grupo G igualados. Tenían una certeza: ambos ya estaban clasificados a octavos de final por sus triunfos ante Túnez y Panamá. Tenían también una suposición futbolera: el que quedara primero caería al sector más difícil del cuadro final y en cambio el segundo iría por el camino presuntamente más accesible. Con esas cartas salieron a jugar en Kaliningrado.
A Adnan Januzaj poco le importó la especulación cuando rompió el molde y metió uno de los goles más lindos de la Copa del Mundo. En el ítem de nacionalidades, Januzaj tiene tres banderas. Nació en Bruselas, la capital belga, pero creció en el seno de una familia albano-kosovar. Y pudo haber estado del otro lado en el choque de ayer en Rusia ya que Inglaterra fue una de las cinco opciones de seleccionados que tuvo en el abanico cuando empezó a crecer como futbolista.
Podía elegir a Kosovo o a Albania por el origen de sus padres. También a Turquía o a Serbia por el lugar de nacimiento de sus abuelos. Y además a Inglaterra por su residencia superior a cinco años allí cuando hizo inferiores y debutó en el Manchester United. Pero aceptó el llamado de Wilmots y desde 2014 juega para Bélgica.
Januzaj fue uno de los que aprovechó este extraño tercer partido del grupo. Sin urgencias, sin obligaciones y sin terminar de convencerse si era mejor ir con todo por el triunfo o no los dos técnicos cuidaron a sus figuras. Así los goleadores Kane y Lukaku, por ejemplo, se quedaron en el banco. Si alguien había arreglado un empate, nadie le avisó al pibe de 23 años de la Real Sociedad.