El rendimiento de Zárate entusiasmó
Se habló tanto de Mauro Zárate... Desde que se supo que decidió romper su palabra, dejar Vélez y aceptar la oferta de Boca, mucho se dijo del delantero de 31 años. En Liniers lo tildan de traidor. En Boca, en cambio, lo recibieron con expectativa. Y por lo visto en el amistoso de anoche, empezó a cumplir con las sensaciones previas que había generado su llegada. Por el gol y por esa pared que terminó en el grito del colombiano Sebastián Villa.
“Me sentí muy cómodo y pude convertir, que siempre es bueno para cualquier delantero, pero lo importante es que empezamos a sumar minutos de juego. Poder ganar ritmo después de la pretemporada era lo importante. Hay que seguir trabajando e ir despacio”, le dijo Zárate a Clarín.
Será una competencia mano a mano con Carlos Tevez, está claro. Al menos, en el 4-2-3-1, Mauro arrancó de mediapunta, detrás del 9, que en el primer tiempo fue Wanchope Abila y en el segundo, Darío Benedetto. Zárate mostró que está veloz, que tiene panorama para meter una pelota entre líneas y que puede ser ese generador de juego que necesita Boca en la zona de tres cuartos. También, que asumirá la responsabilidad de darle contundencia al equipo. Había hecho dos goles y tres asistencias en el amistoso informal contra el Miami United (victoria xeneize por 7-2, con tres del Pipa).
Zárate entró muy bien en el grupo. Guillermo Barros Schelotto buscó que se adaptara rápido y le pidió que compartiera la habitación con Benedetto, uno de los referentes. Pegaron onda. Eso sí, tendrá un oponente de fuste en la batalla por la titularidad. De Tevez, un ídolo del club, se trata. Carlitos, con look platinado, lo reemplazó a los 17 minutos del segundo tiempo. Todo un indicativo de que el Mellizo los quiere ver en acción a los dos. Y sobre el final del partido, el delantero de Fuerte Apache anotó un gol que mete presión, después de una asistencia de Edwin Cardona.