“Sampaoli tenía clara la idea, pero cambió y cedió demasiado”
D aniel Angelici prende un habano que lo ayuda a pensar por algunos segundos más antes de lanzar cada frase y, al final, apunta directo. -¿Qué significa la Libertadores para usted?
-Es una gran deuda que tengo con el hincha de Boca. Es lo que siento. Hemos cumplido con el 90% de la plataforma electoral, hemos profesionalizado las áreas y el club está en un momento económico muy bueno. La gestión es sólida. Pero nuestro deseo es lograr la Copa. Más allá del eslogan de campaña con aquello del pasaporte, sentimos que trabajamos y que tenemos un club preparado para eso. En mi gestión llegamos a una final (2012), estuvimos en cuartos de final, en semis. Pero queremos el título. -Se habla de obsesión por la Libertadores ¿Eso es bueno o malo?
-Tal vez nos sobrecargamos de presión, y muchas veces trato de absorber esa presión yo, pero es lo que el hincha de Boca quiere. También el tricampeonato es muy importante, queremos lograrlo por primera vez y sería un logro muy importante. En la Copa Argentina hay que estar atentos; algunos equipos de Primera han quedado afuera y a algunos grandes se les complicó. Tenemos una ilusión muy grande. -¿El plantel está completo?
-Hicimos un esfuerzo importante. Se retuvo a Pavón, a Barrios. Se recuperó a Benedetto y se incorporaron futbolistas de buen nivel. También teníamos la ilusión de contar con Fernando, quien lamentablemente se lesionó. Pero el cuerpo técnico está conforme y nosotros también. Han trabajado fuerte y ahora es el momento de jugar. -¿Qué pasará con Gago? -Me voy a juntar con él. Estaba muy ilusionado con volver a reali- zar la pretemporada y arrancar de nuevo la competencia oficial. Es un ejemplo y es muy querido por sus compañeros. Es el capitán y se repuso de lesiones muy complicadas que son difíciles de dejar atrás. Decidimos que viaje a Buenos Aires para que empiece lo antes posible su recuperación. Es un gran chico, fui a buscarlo al Valencia en su momento. Esperamos contar con él. -¿El arco todavía lo inquieta?
-Tenemos en Rossi a un gran arquero, que es joven y quizá a esa edad todos los jugadores tienen un tiempo de madurez que en el arco a veces te cuesta más porque cada error se paga con un gol. Estuvimos buscando alternativas pero no es fácil. En el caso de Guzmán, el jugador no quiso forzar nada con su club. El caso de Marchesín es similar. Con Rulli hubo un acuerdo por un préstamo y luego se modificó. Hay otros arqueros que son interesantes, pero también difíciles. -¿Por ejemplo?
-El arquero mexicano, Guillermo Ochoa, es interesante. Pero todos los futbolistas que jugaron el Mundial se cotizaron de otra manera. Hasta el último día del mercado de pases vamos a estar atentos. -Lo llevo a la Selección. ¿Quién le gustaría como próximo técnico?
-Creo que primero debemos replantearnos y revisar lo que se hizo mal. Si buscamos un entrenador, estaremos haciendo el mismo camino que en los últimos años. Esta vez me parece que hay que ir de abajo hacia arriba, atendiendo las Inferiores. Y la figura del Director Deportivo creo que es necesaria. Se comentó la posibilidad de José Pekerman y yo creo que Alejandro Sabella es un hombre respetado y con una mirada amplia. También Jorge (Burruchaga) debe ser tenido en cuenta. -¿Por qué pocos mencionan al técnico de Boca como candidato?
-En mi caso, estoy convencido de que Guillermo tiene la personalidad para ser el técnico de la Selección. Logró un bicampeonato en el fútbol argentino, que no es fácil, tiene un equipo de trabajo muy bueno, es honesto, es el líder de un plantel con figuras y está en la camada de técnicos jóvenes que se han posicionado muy bien en el fútbol. Pero siendo el vicepresidente de AFA y el presidente de Boca tal vez hacia afuera se tome a mal que lo nombre o lo sugiera. Estamos contentos de tenerlo con nosotros en Boca. -¿Sampaoli lo decepcionó?
-Es difícil de responder... Fui uno de sus principales impulsores, pero creo que todos coincidíamos en ese momento que estaba bien elegido. Luego no viví tan de cerca lo que ocurrió, pero es evidente que cedió en sus ideas. Sampaoli no fue Sampaoli en la Selección y él sabrá por qué. Lo que se dice desde afuera, los apellidos que se nombran en las charlas, lo que pasó no lo viví porque no estuve ahí. Pero el jefe es el entrenador y es el que debe imponerse, no puede ceder eso. -¿Y por qué no fue Sampaoli?
-Porque cuando fuimos a buscarlo tenía clara la idea de juego, el método y había hecho un análisis de la situación. Pero cambió sus convicciones y eso es difícil de hacer ante un grupo. Cedió demasiado. -¿Messi es imprescindible?
-Messi es el mejor jugador de todos, pero en la cancha son once. Y si el equipo no funciona, es difícil que alguien pueda arreglarlo. En la Argentina somos muy de pensar en que alguien venga y nos salve, en lugar de trabajar para arreglarlo. Por eso hay que revisar lo que se hizo y cambiar, imprescindibles no hay en ningún ámbito, pero siempre es mejor contar con el mejor de todos. -¿Cree que Marcelo Gallardo debe ser el técnico de la Selección?
-Es un gran entrenador y por eso ha tenido éxito en su carrera. Como lo tuvo Simeone en el Atlético de Madrid o lo que hizo Pochettino en el Tottenham. Hay trabajos de entrenadores que son muy respetados. La mayoría de las Selecciones volvió a su país y fue recibida por una multitud. Menos la Argentina y eso es para replantearse varias cosas. No tendría problemas en sentarme a negociar para sumar a Gallardo, pero primero hay que hablar con su club si es que finalmente es el elegido por todos. -¿D´Onofrio debe incorporarse a la AFA?
-Yo voy a llamar a Rodolfo D´Onofrio y a Matías Lammens porque creo que representan a instituciones muy importantes del país y deben estar donde se toman las decisiones. El Comité Ejecutivo de la AFA ya está conformado, pero es importante que trabajen por el bien del fútbol argentino. Ellos están en la Superliga, ocupan lugares importantes. Es importante que participen de las decisiones. -¿Usted quiere presidir la AFA?
-No es algo que tenga en mente en este momento y falta mucho para eso. Es difícil que un dirigente de un club grande sea el presidente de la AFA. Quedan dos años y medio de gestión de esta conducción y en el futuro se sabrá. En mi caso, tengo mandato hasta 2019 en Boca y la obligación de preparar al oficialismo para las próximas elecciones.